Tokio, 31 ene (EFE).- El fabricante japonés de automóviles Honda aumentó de abril a diciembre, primeros nueve meses del año fiscal 2012, su beneficio neto un 108,3 % hasta los 291.300 millones de yenes (unos 2.360 millones de euros), informó hoy la compañía.
En este periodo su beneficio operativo fue de 408.800 millones de yenes (algo más de 3.300 millones de euros), más del triple de los 119.300 millones de yenes (966 millones de euros) del mismo periodo de 2011, año en el que se vio seriamente afectado por el tsunami en el noreste nipón y las inundaciones en Tailandia.
Las ventas del tercer fabricante de Japón se situaron en los 7,13 billones de yenes (57.720 millones de euros), un 28,68 % más que en el mismo periodo de 2011.
La empresa, con sede en Tokio, vendió en este periodo 11,53 millones de motocicletas, 635.000 más que el año anterior, y 2,98 millones de automóviles, 895.000 más que en el mismo periodo de 2011.
Además, su división de motores y generadores vendió 4,1 millones de unidades, casi 300.000 más que entre abril y diciembre de 2011.
Solo en el tercer trimestre del año, de octubre a diciembre, la empresa ganó 77.400 millones de yenes (626 millones de euros), un 62,39 % más interanual, mientras que el beneficio operativo fue de 131.900 millones de yenes (1.067 millones de euros), el triple que el año anterior.
Los buenos resultados del tercer trimestre corresponden a la recuperación de las catástrofes naturales de 2011 y al incremento de las ventas en norteamérica, informó el tercer fabricante nipón del motor.
No obstante, la empresa redujo en 5.000 millones de yenes (40,5 millones de euros) su previsión de beneficio neto para este año fiscal 2012, que concluye el 31 de marzo y en el que espera ganar 370.000 millones de yenes (casi 3.000 millones de euros), un 74,7 % más que en 2011.
La compañía mantuvo no obstante sus previsiones de beneficio operativo en 520.000 millones de yenes (más de 4.200 millones de euros) y la de sus ventas en 9,8 billones de yenes (79.300 millones de euros).
Honda espera contrarrestar en este año fiscal los efectos negativos de la caída de la demanda en Europa y en China (por las consecuencias de la disputa territorial entre Japón y China por las islas Senkaku/Diaoyu) con la reciente depreciación del yen, lo que aumenta sus beneficios al repatriarlos. EFE