Nueva York, 8 sep (EFE).- Wall Street cerró hoy una jornada con una fuerte subida, en una sesión que apostó al alza desde el comienzo y, aparentemente, pasando la página respecto a las preocupaciones sobre la economía china de los últimos días.
El Dow Jones, el principal indicador del mercado bursátil de Nueva York, ganó un 2,42 % o 390,30 puntos, hasta las 16.492,68 unidades, todavía lejos del récord de 18.312,39 puntos del pasado 19 de mayo.
También subieron el selectivo S&P 500 y el índice compuesto del mercado Nasdaq, un 2,51 y un 2,73 %, respectivamente, con un avance que siguió la tendencia de los mercados bursátiles de Europa y de Asia, a excepción del japonés, que retrocedió el martes.
La de hoy fue la primera sesión de la semana en Wall Street, después del largo fin de semana por el Día del Trabajo, pero los operadores llegaron al parqué con ganas de comprar, generando uno de los mayores impulsos de las últimas semanas.
Los analistas calificaron la sesión de hoy como un rebote respecto a los resultados de la semana pasada, cuando Wall Street tuvo la segunda peor semana del año, impactada por las repercusiones de los malos datos económicos de China.
Pero la atención de hoy estaba centrada en la reunión que sostendrá el 16 y 17 de septiembre el Comité de Mercado Abierto de la Reserva Federal (Fed), donde revisará el nivel de las tasas de interés, cercanas al 0 %.
Al respecto, el multimillonario Warren Buffett, el inversor más importante de Wall Street y que dice que en los próximos meses colocará unos 32.000 millones de dólares en el mercado, sostuvo que la Fed no debería ser "terriblemente agresiva".
De hecho, minimizó la influencia de las medidas de la Fed para sus negocios y dijo que nunca ha adoptado una decisión en cuanto a sus inversiones de acuerdo con lo que dijera la Reserva Federal a corto o largo plazo, sino considerando el desempeño de las empresas cuyos títulos compra o vende.
En ese mismo sentido, la última hora de la sesión de hoy en Wall Street se vio afectada por declaraciones del economista jefe del Banco Mundial, Kaushik Basu, en las que recomendó a la Fed no revisar al alza las tasas de interés.
Según dijo Basu en una entrevista al Financial Times, un alza en las tasas de interés "no va a crear en sí una gran crisis, pero causará inmediatas turbulencias", sobre todo teniendo en cuenta el impacto de la devaluación china del mes pasado.
"La economía mundial parece estar tan preocupada que si Estados Unidos hace un movimiento rápido en medio de todo esto creo que va a afectar a los países bastante mal", agregó.
En medio de este debate, que se repite periódicamente en Wall Street, los mercados bursátiles de Nueva York se comportaron con un avance parecido al de la mayoría de las principales bolsas mundiales.
Sólo estuvo fuera de tono la Bolsa de Tokio, que cedió un 2,43 % en el Nikkei, su índice principal, por una caída vinculada con noticias sobre la revisión que hicieron las autoridades a la actividad económica del segundo semestre.
Ese descenso contrastó con una subida del 2,92 % de la Bolsa de Shanghái, y con las subidas que también tuvieron los mercados bursátiles de Europa, donde da la impresión de que las preocupaciones que había sobre China han quedado superadas.
El DAX 30 alemán ganó un 1,61 %, impulsado por un aumento de las exportaciones en julio, y el CAC-40 francés ganó un 1,07 % como reacción al anuncio de un crecimiento del PIB de la zona euro del 0,4 % en el segundo semestre.
En Londres, el FTSE 100 subió un 1,18 %, el principal indicador de la Bolsa de Milán ganó un 1,48 % y el IBEX 35 de Madrid tuvo un alza más discreta, del 0,62 %.