Madrid, 29 feb (EFE).- El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, apostó hoy por fortalecer los lazos comerciales y de inversión con Iberoamérica, con marcos jurídicos estables, para impulsar el crecimiento y la creación de empleo, y se ha comprometido a afrontar la crisis con un "optimismo realista".
"España superará esta crisis como ha superado otras y superará las que vengan después. Iberoamérica superó también el pesimismo de los que hablaban de décadas perdidas. Lo que no podemos hacer es perder la confianza en nosotros mismos", dijo Rajoy en la presentación de la Cumbre Iberoamericana que se celebrará en Cádiz (sur) el 16 y el 17 de noviembre próximo.
El Gobierno español quiere volcarse en esta cita y al acto han asistido la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, además de las alcaldesas de Cádiz, Teófila Martínez, y Madrid, Ana Botella, y el secretario general iberoamericano, el uruguayo Enrique Iglesias.
Rajoy explicó que España aspira a una relación de "absoluta igualdad" con todos los países iberoamericanos y ha considerado que nadie tiene que renunciar a su ideología siempre que se coincida en lo fundamental: "el valor de la libertad, la democracia y el respeto a los derechos humanos".
Apostó así por volver a los principios esenciales que inspiraron la Constitución de Cádiz en 1812 y que son la base del actual Estado de Derecho, como la soberanía nacional, la libertad individual, la separación de poderes y la igualdad jurídica.
Tras elogiar el progreso social y económico que vive el continente sudamericano, abogó por propiciar una relación más equilibrada con la UE: "Iberoamérica tiene mucho que aportar y España tiene los brazos abiertos".
Ante la crisis económica, apostó por aunar esfuerzos y ha avanzado que entre las reuniones ministeriales que precederán a la Cumbre de Cádiz habrá una importante Reunión de Alto Nivel de Asuntos Económicos.
Esta cita se complementará con una reunión de ministros de Industria para analizar la posibilidad de que las pymes colaboren en la región, y otra de ministros de Fomento, centrada en la necesidad de que Iberoamérica apueste por el desarrollo de sus infraestructuras.
Sáenz de Santamaría también presidirá una reunión ministerial.
La cumbre celebrada en 2011 en Asunción contó solo con la presencia de la mitad de los mandatarios iberoamericanos, y España quiere que la de Cádiz sea un éxito.
"Es conveniente revitalizar y dar un nuevo impulso a las cumbres, sin perjuicio de la presencia en otros foros", afirmó Rajoy ante los numerosos embajadores latinoamericanos presentes después
A su juicio, conmemorar el bicentenario de la Constitución de Cádiz es "un acto de justicia histórica inexcusable".
Tras recordar la participación de 86 "representantes ultramarinos" en la redacción de esa Carta Magna, recordó que supuso una "verdadera revolución" al hacer que los españoles abandonaran su condición de súbdito y adquirieran la plena conciencia de su ciudadanía.
Iglesias defendió también por la cooperación económica entre ambos lados del océano, tras recordar el éxito de muchos países latinoamericanos en la salida de la crisis.
Superar esta etapa, a su juicio, exigirá el concurso de todos, pero también "una justa distribución de los sacrificios".
Rajoy tuvo también palabras de solidaridad para las familias de las víctimas del accidente ferroviario registrado en Argentina, del incendio de la cárcel de Comayagua (Honduras) y de los recientes atentados terroristas en Colombia. EFE