Pekín, 28 oct (EFE).- China cooperará con otros países en la utilización de las "tierras raras", materiales vitales para industrias como la tecnológica o la militar y de las que el país asiático controla el 90 por ciento de la producción mundial, informó hoy un portavoz estatal a través de la agencia oficial Xinhua.
De acuerdo con Zhu Hongren, portavoz del Ministerio de Industria y Tecnología de la Información, China ha tomado medidas para restringir la explotación, producción y exportación de tierras raras "para ayudar a enfrentar problemas de la industria tales como la polución o los residuos".
Las palabras de Zhu vienen a responder las peticiones de "transparencia" en el sector por parte de países como Japón y EEUU, altamente dependientes de las importaciones de tierras raras de China, y que en los últimos años han expresado su preocupación por la paulatina restricción de las exportaciones chinas en este campo.
El portavoz aseguró en rueda de prensa que las medidas tomadas por China están en línea con las normativas de la Organización Mundial del Comercio.
El gigante asiático tiene sólo el 55,7 por ciento de las reservas probadas de tierras raras, pero concentra el 97 por ciento de la producción mundial, ya que países como Estados Unidos optaron por paralizar la extracción de estos materiales en sus propios yacimientos debido a la alta contaminación que producen.
Japón denunció el pasado mes de septiembre el uso de las tierras raras como arma política por parte de China, ya que en el conflicto diplomático que enfrentó a ambos gobiernos por la detención de unos pescadores chinos, se produjo una paralización temporal de las exportaciones de la materia prima al archipiélago nipón.
La secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, afirmó ayer, miércoles, que confiaba en que China dejara claro que no iba a utilizar estos materiales como una "herramienta de regateo".
Las 17 tierras raras son escandio, itrio, lantano, cerio, praseodimio, neodimio, prometio, samario, europio, gadolinio, terbio, disprosio, holmio, erbio, tulio, iterbio y lutecio, y también hay importantes yacimientos de éstas en naciones emergentes como India o Brasil.
La preocupación por el dominio chino ha llevado a empresas de países como Australia, EEUU o Canadá a planear la explotación de yacimientos, pero tardarán años en hacerlo, y las dudas ambientales y la crisis económica han paralizado muchos de esos proyectos. EFE