Madrid, 21 oct (.).- La directora general de Consumo, Bibiana Medialdea, ha precisado este miércoles que el etiquetado en el que trabaja el Ministerio para que de forma voluntaria se incluya el índice de reparabilidad de un producto permitirá saber cuánto cuesta la pieza que se ha de reparar o el arreglo en sí del aparato.
Medialdea se ha referido a este índice que ya anunció la pasada semana a Efe durante su intervención en la comisión de Sanidad y Consumo, en la que ha dicho que ese etiquetado incluirá una puntuación, del 1 al 10, para saber cómo es de fácil o difícil reparar el material, si son accesibles o no las piezas para hacer el arreglo y una estimación del precio que pueden tener.
En función de esos criterios, se calculará ese índice, que va a poder permitir a las personas consumidoras tomar la decisión y que es similar al que entró en vigor en Francia a principios de este año.
Un año en el que se espera que se avance en una Ley de Servicios de Atención al Cliente, porque según Medialdea no puede haber barreras para ejercer el derecho a la reclamación y éstos en España muchas veces llevan a "la frustración" y "a tirar la toalla".
Por eso, la responsable de Consumo ha dicho que se garantizarán que sean gratis y evaluables y que se puedan auditar.
Durante su comparecencia, los diputados han mostrado su preocupación por el etiquetado Nutriscore, un buen instrumento, ha dicho Medialdea, que va a permitir mejorar la calidad nutricional de la población, y sobre todo de la vulnerable, con lo que se seguirá trabajando en él pero en la idea de que sea voluntario.
No obstante, ha reconocido de que "hay que mejorar el algoritmo" y que hay que avanzar para que elementos como la dieta mediterránea puedan incorporarse.
Por otra parte, ha defendido la regulación de las mascarillas frente a la COVID, ha insistido en la política del Ministerio del derecho a la devolución cuando ha sido imposible ejercer el derecho al consumo (vuelos o festivales de música) durante la pandemia y ha asegurado que su departamento va a reactivar el Observatorio de Internet para proteger al consumidor en las compras online y combatir los fraudes electrónicos.