Por Tetsushi Kajimoto
TOKIO, 15 mar (Reuters) - Las grandes empresas japonesas están dispuestas a ofrecer este año las mayores subidas salariales en un cuarto de siglo, impulsadas por una inflación en máximos de 41 años, en una señal de que podrían estar aceptando los llamamientos del primer ministro Fumio Kishida para impulsar el consumo a través de salarios más altos.
A medida que las negociaciones laborales anuales apodadas "shunto", que en japonés significa "ofensiva de primavera", concluyen en muchas empresas de primera fila el miércoles, surgen señales positivas.
Japan Inc podría estar dispuesta a aumentar los salarios hasta un nivel que pueda al menos contrarrestar el alto costo de la vida en un contexto de creciente inflación de las importaciones.
Según una encuesta realizada por el Centro de investigación Económica de Japón (JERC) entre 33 economistas, se espera que las principales empresas aumenten los salarios un 2,85%, muy por encima del 2,2% del año pasado, y el aumento más rápido desde 1997, cuando Japón se sumió en 15 años de deflación.
Dado que la inflación al consumo, del 4,1%, supera las subidas salariales, es necesario que en los próximos años continúen los aumentos salariales del 3% o más para mantener la estabilidad de precios en el 2%, según Hisashi Yamada, economista jefe del Instituto de investigación de Japón.
"Las subidas salariales medias coherentes con el objetivo de precios del 2% del banco central son del 3%, lo que puede cumplirse este año, aunque temporalmente", dijo Yamada.
Takahide Kiuchi, antiguo miembro del consejo del Banco de Japón y actual economista ejecutivo del Instituto de investigación Nomura, afirmó que las subidas salariales básicas son la clave para determinar cómo pueden afectar los salarios a los precios.
SEGUIR EL RITMO
Ya hay algunas señales alentadoras. Los trabajadores del mayor grupo sindical de Japón alcanzaron la semana pasada acuerdos anticipados de fuertes subidas salariales. Otros sindicatos de Toyota, primer fabricante mundial de automóviles, y Honda (TYO:7267), también han conseguido sus mayores subidas salariales en décadas.
La particularidad del shunto en Japón es que, cada mes de marzo, más de 300 grandes empresas con un capital igual o superior a 1.000 millones de yenes y 1.000 o más trabajadores negocian con su sindicato siguiendo el ejemplo de aquellas que marcan el ritmo salarial, como Toyota Motor (TYO:7203) Corp.
Sin embargo, sigue sin estar claro si la oleada de subidas salariales podría extenderse a las pequeñas empresas, que emplean a siete de cada 10 trabajadores en el país, pero tienen dificultades para repercutir los costos a sus clientes más grandes al final de las cadenas de suministro.
(Reporte de Tetsushi Kajimoto; Editado en español por Aida Peláez-Fernández)