Bagdad, 31 ene (EFE).- Un consorcio liderado por la compañía rusa
Lukoil firmó hoy con el Ministerio de Petróleo iraquí el contrato
final para explotar el yacimiento de crudo de West-Qurna 2, uno de
los más grandes de Irak, según la agencia "Aswat al Iraq".
En declaraciones a la agencia de noticias independiente iraquí,
un portavoz del Ministerio, Asam Yihad, explicó que el consorcio "se
ha comprometido a aumentar la producción hasta pico de 1,8 millones
de barriles al día por un precio de 1,15 dólares por cada barril
adicional de crudo producido".
El pasado 12 de diciembre, un consorcio integrado por Lukoil y el
grupo noruego Statoil, se adjudicó la explotación de ese campo
petrolero, situado en el sur de Irak, con unas reservas comprobadas
de más de 12.900 millones de barriles.
En la actualidad, el país árabe produce una media diaria de unos
2,4 millones de barriles de crudo, que tiene la intención de
triplicar en los próximos años.
Lukoil suscribió en 1997 un contrato por valor de 3.800 millones
de dólares con el régimen del difunto dictador iraquí Sadam Husein
para el desarrollo hasta 2020 del yacimiento de West-Qurna 2.
Tras la caída del Gobierno de Sadam en abril de 2003, la compañía
mantuvo que el contrato seguía siendo válido, pero las nuevas
autoridades iraquíes replicaron que los pactos suscritos por las
petroleras rusas con el antiguo régimen habían sido automáticamente
revocados con el derrocamiento del dictador.
Rusia era uno de los pocos países que mantenía una relación
privilegiada con el régimen de Sadam, lo que no fue bien visto por
las nuevas autoridades iraquíes apoyadas por EEUU.
Esto llevó a la congelación en 2003 de los lucrativos contratos
suscritos por las petroleras rusas, víctimas de la negativa de Rusia
a respaldar la guerra en Irak en el Consejo de Seguridad de Naciones
Unidas.
En 2008, el entonces presidente y actual primer ministro ruso,
Vladímir Putin, defendió el retorno de las petroleras rusas a Irak
en un mensaje enviado al primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki,
tras lo que condonó casi la totalidad de la deuda iraquí. EFE