Roma, 10 ene (.).- La Autoridad Garante de la Competencia y del Mercado (AGCM) de Italia pidió hoy a la Guardia de Finanza (policía de delitos económicos) buscar documentación de eventuales "prácticas comerciales irregulares" detrás del encarecimiento del carburante.
El presidente del ente antimonopolio, Roberto Rustichelli, escribió al comandante general de ese cuerpo policial, Giuseppe Zafarana, para solicitar su colaboración, según un comunicado.
En concreto, le emplazó a "adquirir documentación relativa a los recientes controles efectuados sobre los precios de los carburantes, con particular referencia a las violaciones constatadas".
La situación preocupa en el Gobierno de Giorgia Meloni, que este martes mantuvo una reunión con el comandante Zafarane, junto a su ministro de Economía, Giancarlo Giorgetti, para tratar el tema.
En concreto, el objetivo del encuentro, del que aún no han trascendido detalles, era estudiar medidas contra la "especulación" en el aumento de los precios del carburante.
Italia asiste a un aumento repentino del precio del carburante: la última semana el precio del litro de gasolina y del gasóleo era de 1,81 y 1,86 euros, respectivamente, lo que supone un aumento de 18,7 y 16,1 céntimos respecto al día 1 de enero, según los datos del Ministerio de Desarrollo Económico.
En algunas gasolineras de la red de autovías italiana este precio alcanza los 2,5 euros, según denuncian diversas organizaciones de consumidores y sindicatos.
El Gobierno de Meloni cree que detrás de este fenómeno hay una presunta "especulación" de las compañías petrolíferas y las gasolineras, pero su oposición y dichas organizaciones reprochan que se debe al aumento de una serie de impuestos especiales.
El anterior Gobierno, presidido por Mario Draghi hasta octubre, aprobó una serie de medidas para contener el aumento de estos impuestos y el precio del combustible pero Meloni no las renovó, lo que supuestamente ha provocado el alza con el año nuevo.
Así lo aseguran entidades como la Federación Autónoma Italiana de Gasolineros (FAIB), que apuntó que estos precios están "vinculados a la reintroducción plena" de dichos impuestos especiales, aplicados en el pasado, incluso hace décadas, pero jamás retirados.
Tal es así que, según sus cálculos, llenar el depósito de un coche con gasolina cuesta hoy de media 15 euros más que hace diez meses.
Por su parte, la asociación de consumidores Assoutenti denunció lo que considera "una nueva emergencia en Italia" causado por "la no renovación del recorte de los impuestos especiales".
Esta tarde se reúne el Consejo de Ministros y, aunque en el orden del día no consta esta cuestión, los medios avanzan que será estudiada.