Por Andy Bruce y William Schomberg
LONDRES, 20 ene (Reuters) - La inflación británica tomó velocidad en diciembre, iniciando un previsible proceso de escalada este año a medida que las medidas de lucha contra la pandemia, el Brexit y la recuperación de la economía se conjugan para aumentar los costes para consumidores y empresas.
Los precios al consumidor aumentaron un 0,6% en términos anuales después de un incremento del 0,3% en noviembre, según la Oficina de Estadísticas Nacionales.
Una encuesta de Reuters entre economistas apuntaba a una tasa del 0,5%.
Una relajación temporal de las restricciones al viaje por la COVID-19 ayudó a subir las tarifas aéreas y marítimas, mientras que el aumento de los precios mundiales del petróleo encareció el combustible, y el precio de la ropa también se elevó.
La inflación ha estado por debajo del objetivo del 2% del Banco de Inglaterra desde mediados de 2019 y la pandemia de COVID-19 la empujó cerca de cero mientras la economía se hundía.
Sin embargo, es probable que aumente a medida que el impacto de los recortes del impuesto sobre el valor añadido y otras medidas de emergencia contra la pandemia desaparezcan de las comparaciones estadísticas, y debido a la nueva relación comercial menos abierta de Reino Unido con la Unión Europea.
(Información de Andy Bruce; editado por William Schomberg y Toby Chopra; traducido por Tomás Cobos)