Londres, 11 dic (EFE).- Los bancos, y no los banqueros,
absorberán seguramente el costo del impuesto especial del 50 por
ciento a las primas superiores a 25.000 libras (27.500 euros)
anunciado esta semana por el Tesoro británico.
"Creo que los bancos se tragarán el impuesto. No creo que los
banqueros vayan a sentir su impacto", declaró al Financial Times un
destacado ejecutivo de un banco de inversiones estadounidense.
"Los bancos absorberán una mayor parte de ese impuesto de lo que
cree en Tesoro. Los bancos compiten siempre hacia arriba en la
remuneración a su personal porque hay necesidad de talentos",
explicó otro.
Si eso es lo que ocurre realmente, el Gobierno británico no
estará en absoluto contento ya que confiaba en una drástica
reducción de los bonos que se pagan a los banqueros como
consecuencia de ese superimpuesto.
El Gobierno había previsto con todo recaudar sólo 550 millones de
libras (605 millones de euros) con ese impuesto especial ya que
consideraba que los bancos reducirían el total de primas pagadas, y
que algunos banqueros calculan en hasta 12.000 millones (13.200
millones de euros) en un intento de evitar ese impuesto.
Otra táctica que se cree aplicarán los bancos consistirá en
aumentar los salarios base para compensar los eventuales recortes de
primas, algo que ya han hecho varios bancos estadounidenses y el
británico Barclays.
Los accionistas por su parte temen el impacto inflacionario que
pudiera tener el nuevo impuesto en los salarios o las primas ya que
afectaría negativamente a los beneficios potenciales de los bancos.
"El impuesto no debería suponer un costo adicional para los
accionistas, a su vez contribuyentes, que son los dueños de los
bancos bien directamente por la participación del Estado en los
mismos o indirectamente a través de las pensiones y otros mecanismos
de ahorro", afirma Peter Montagnon, de la Asociación de Aseguradores
Británicos.
Mientras tanto, según señala también el Financial Times, ha
sorprendido en la City el hecho de que el ministro de Finanzas,
Alistair Darling, eximiera del impuesto especial las primas
garantizadas mediante contrato, que son precisamente el elemento más
generoso del sistema de compensación de los banqueros.
Los banqueros que tienen garantizado por contrato una prima
reciben una cantidad fija con independencia de su grado de
cumplimiento de los objetivos.
Así, alrededor de trescientos banqueros de Nomura firmaron sendos
acuerdos de dos años con el banco japonés cuando éste adquirió en
septiembre de 2008 las operaciones europeas del quebrado Lehman
Brothers.
El Royal Bank of Scotland también ha contratado a docenas de
banqueros garantizándoles mediante contrato el pago de primas y
Barlcyas Capital, división de inversiones de Barclays, ha firmado
igualmente contratos de dos años de duración con algunos empleados.
Los bancos de la City están ya consultando a los principales
bufetes de abogados para ver si, en el caso de algunos de sus
empleados, el hecho de haberlos recompensado anualmente en el pasado
con un porcentaje de los beneficios obtenidos puede equipararse a un
contrato. EFE