Atenas, 11 oct (.).- La temporada turística, que normalmente termina a finales de octubre en Grecia o, incluso, en el sur del país a mediados de noviembre, este año acabó un mes antes para centenares de hoteles por la quiebra del turoperador Thomas Cook (LON:TCGI), que va a provocar unas pérdidas de 315 millones de euros, según el sector.
La caída del gigante turístico británico puede causar también pérdidas millonarias a la maltrecha economía griega, cuya locomotora es el turismo.
Thomas Cook colaboraba en Grecia con el 12 % de los hoteles del país -1.193 de un total de 9.917- y sólo en 2018 llevó al país heleno tres millones de viajeros, lo que representó el 9 % de las llegadas turísticas.
Su quiebra ha afectado particularmente a las islas de Rodas y Cos en el Dodecaneso, la parte oriental de la isla de Creta, las islas del mar Jónico y las Espóradas.
Según un estudio del Instituto de Estudios y Previsiones Turísticas (ITEP) de la Cámara de Hoteleros griega, las pérdidas del sector este año alcanzarán los 315 millones de euros. Equivalen principalmente a las facturas de los meses de junio, julio y agosto, la temporada alta para el turismo.
Para 483 hoteles griegos, Thomas Cook representaba entre el 25 % y el 100 % de su volumen de negocio.
El Gobierno ha anunciado una serie de medidas de alivio para los hoteleros afectados, que incluyen la quita del impuesto de pernoctaciones y el aplazamiento durante seis meses del pago del IVA correspondiente a las facturas impagadas por el turoperador.
"A estas medidas les falta audacia. Se debería al menos exonerar a los hoteles del IVA de las facturas impagadas", dice a Efe Grigoris Tasios, presidente de la Federación Nacional de Hoteleros.
El estudio de ITEP evalúa que las pérdidas en el turismo por la quiebra del turoperador británico en el 2020 podrían alcanzar los 929 millones de euros.
El impacto indirecto sobre la economía del país, según el estudio, podría alcanzar los 2.500 millones de euros, el 1,3 % del PIB, un escenario que si se cumple mermará el crecimiento económico del país en los próximos años.
Esta estimación considera que los contratos de los hoteles con los turoperadores ya han sido firmados para el año 2020.
La quiebra de Thomas Cook afectará asimismo al comercio, restauración y construcción, ya que centenares de hoteles no llevarán a cabo en 2020 las reformas que suelen hacer cada año antes del comienzo de la temporada turística.
Panayotis Petrakis, profesor de Economía en la Universidad de Atenas, reconoce que muchos hoteles quebrarán y que en algunas regiones el impacto será grave pero no comparte el análisis de ITEP.
"Este estudio da por hecho que los demás turoperadores no cubrirán el vacío dejado por Thomas Cook. Esto no es posible, el mercado reaccionará", dice a Efe.
Tasios ve que esta crisis puede ser la oportunidad para una profunda reforma del sector, que debe apostar por diversificar los productos turísticos, reducir la dependencia de los turoperadores y atraer mas turistas de ingresos altos.