WASHINGTON, 15 oct (Reuters) - Las subvenciones a la energía en Europa pueden reducir la tasa de inflación actual, pero sólo a costa de futuras lecturas más altas, lo que podría complicar la tarea de la política monetaria, dijo el sábado el gobernador del Banco Central Europeo (BCE) François Villeroy de Galhau.
Ante el temor de que los elevados precios de la energía mermen el poder adquisitivo de los hogares, los gobiernos están desplegando medidas de ayuda y algunos ya han advertido que un gasto excesivo podría poner en conflicto la política fiscal y la monetaria, ya que una se está relajando mientras la otra se está endureciendo.
"No debemos hacernos la ilusión de que los topes de precios reducen la inflación subyacente", dijo Villeroy el sábado en Washington, en una reunión del G30, un grupo de representantes financieros públicos y privados.
"Puede que sólo ayuden a reducir el riesgo de efectos secundarios", añadió. "Los topes de precios, si son temporales, sólo reducen la inflación medida actual a expensas de la inflación medida futura".
El BCE ha endurecido su política rápidamente este año y Villeroy argumentó que los Gobiernos también deberían desempeñar su papel restableciendo la disciplina fiscal, ya que las políticas fiscal y monetaria están desalineadas.
En lugar de aumentar el gasto, que se suma a las ya elevadas presiones inflacionarias, los Gobiernos deberían centrar la ayuda en los más necesitados, argumentó Villeroy.
(Reporte de Balazs Koranyi; Editado en español por Javier Leira)