Cambio de modelo chino para comprar, consumir más y lograr el equilibrio

Paloma Caballero

Pekín, 8 mar (EFE).- El Plan Quinquenal que aprobará el 14 de marzo la Asamblea Nacional Popular (ANP) incluye pasos para cambiar el actual modelo económico y comercial basado en las exportaciones a uno nuevo de aumento de las importaciones y fomento del consumo en un mercado que, según el ministro de Comercio, Chen Deming, será el mayor del mundo en la próxima década.

Al final del próximo lustro, China habrá superado a Japón como mayor consumidor de productos de alto valor añadido, dijo Chen en el marco de la ANP, reunida en Pekín.

Según los analistas, para lograrlo, serán factores determinantes el aumento de los ingresos de una población que disfruta los beneficios de un crecimiento del PIB de dos dígitos y que el Gobierno desea ahora sostenido o "científico", junto al deseo cada vez mayor de lujo y calidad.

Medidas como simplificar los procedimientos de importación, disminuir los aranceles y también aumentar el presupuesto dedicado a investigar para innovar y crear marcas chinas, según decidió el liderazgo político, contribuirán decisivamente al aumento del consumo, afirman expertos.

Para Zhang Xiaoji, miembro del Centro de Investigación y Desarrollo del Consejo de Estado (Ejecutivo), el descenso de los impuestos arancelarios, que ya bajaron una media en China del 15,3 por ciento al 9,8 por ciento en 2010, según las cifras oficiales, es fundamental.

Zhang destacó que los elevados impuestos a la importación son un gran obstáculo que bloquea las compras chinas al exterior.

Es conocido que la mayoría de los chinos que viajan al exterior compran mucho productos extranjeros caros y, según el Ministerio de Comercio, el número de quienes adquieren mercancías de lujo fuera se incrementó el 30 por ciento en 2010 respecto a 2009.

Entre las salidas "al exterior" para comprar lujo, se encuentran las que efectúan los ciudadanos chinos a Hong Kong y Macau (Regiones Administrativas Especiales de China).

De esas compras en territorios chinos sometidos al "un país, dos sistemas" se quejan, entre otros, los comerciantes de la vecina Cantón, cuyas autoridades se felicitan por las medidas previstas en el Plan Quinquenal 2010-2015 para impulsar las importaciones.

Según el documento, China "incrementará las compras de bienes de consumo del exterior en manera adecuada como parte de sus esfuerzos para lograr un crecimiento económico y comercial más equilibrado".

Para Xiao Yaofei, del centro de Investigación Económica de la Universidad de Estudios extranjeros de Cantón, las medidas beneficiarán a los consumidores chinos, permitiéndoles acceder a más opciones y servicios mejores en su propio país.

El impulso a las importaciones, ayudará también a equilibrar la balanza comercial china, suavizará la presión para apreciar el yuan y ofrecerá más oportunidades a las empresas extranjeras de acceso al mercado del gigante asiático, dijo Xiao.

Según Huo Deming, profesor de la Universidad de Pekín, la mejor medida que puede incluir el Plan de impulso al consumo en una sociedad ahorradora por los altos costes sociales de la sanidad y la vejez, es crear confianza de que los ingresos se mantendrán a largo plazo y no sufrirán altibajos.

A ello, dijo Huo a la cadena de televisión CCTV, contribuirá la aprobación de la propuesta incluida en el Plan de aumentar el mínimo exento del Impuesto sobre la Renta (de los actuales 2.000 a los 3.000 yuanes) y medidas que eviten el aumento de la inflación con el IPC anual en un máximo del 4 por ciento.

"Una aumento del Indice de Precios al Consumo (IPC) superior al previsto 4 por ciento no permitirá aumentar el consumo", añadió.

En el marco de la ANP, el ministro chino de Comercio confirmó que hasta 2015, China seguirá mejorando su comercio exterior, aumentando las compras para equilibrar el superávit comercial que tiene con muchos países en desarrollo.

Chen también dijo que se impulsarán los acuerdos de libre comercio y advirtió que el incremento de las importaciones puede originar que la balanza de China registre déficit comercial. EFE