Londres, 19 mar (EFE).- La Bolsa de Londres cerró hoy la sesión con una caída del 0,26 por ciento en una jornada en la que los inversores fijaron su atención en la situación de Chipre, donde está previsto aplicar un impuesto sobre los depósitos bancarios.
El índice principal en Londres, el FTSE-100, retrocedió 16,60 puntos, hasta 6.441,32 enteros, mientras que el secundario FTSE-250 cayó un 0,38 por ciento, 53,83 puntos, hasta los 14.035,92 enteros.
El parqué de la capital británica se sumó a las pérdidas generalizadas en los mercados internacionales, que observan con preocupación la evolución de la situación en Chipre, cuyo Parlamento se prepara para votar una propuesta del Gobierno de Nicosia para aplicar un impuesto especial a los depósitos bancarios privados.
El Ejecutivo ha sometido al estudio de la comisión parlamentaria de Finanzas un borrador que prevé dejar exentos de gravamen los depósitos inferiores a 20.000 euros, gravar con un 6,75 por ciento el tramo hasta los 100.000 euros y con un 9,9 los fondos que superen los 100.000 euros.
Pese a todo, el portavoz del Gobierno chipriota, Jrístos Stilianidis, adelantó esta mañana que veía "muy difícil que el gravamen a los depósitos privados sea aprobada por el Parlamento".
Así las cosas, la Bolsa de Londres sufría pérdidas empujada por los números rojos de las compañías mineras: Rio Tinto fue la que más perdió, un 5,19 por ciento o 170 peniques, hasta los 3.107 peniques.
También Evraz y Fresnillo sufrieron caídas, de un 4,54 por ciento y un 3,43 por ciento respectivamente, mientras que la también minera BHP Billiton retrocedía un 3,53 por ciento.
Por contra, el gigante aeronáutico BAE Systems era la empresa con mayores ganancias de una sesión que cerró con un avance del 2,47 por ciento, 9,50 peniques, hasta los 393,40 peniques.
La compañía de aguas Severn Trent también registró ganancias, un 1,70 por ciento, el mismo avance que marcó la cadena de supermercados Sainsbury.
Otra compañía de aguas británica, United Utilities Group, vio cómo sus títulos se revalorizaban un 1,68 por ciento, mientras que la eléctrica National Grid crecía por su parte un 1,56 por ciento. EFE