(Añade datos sobre el acuerdo y declaraciones)
Taipei, 26 jun (EFE).- Decenas de miles de independentistas
taiwaneses marcharon hoy por las calles de Taipei en contra del
Acuerdo Marco de Cooperación Económica (AMCE) con China, que se
sellará el 29 de este mes en la ciudad china de Chongqing.
Bajo lemas como "Dejar que el pueblo decida" y "Contra el mercado
único chino", acompañado, por el ruido de "vuvuzelas taiwanesas",
los manifestantes recorrieron las calles de Taipei, pero una fuerte
lluvia dispersó a muchos antes de concentrarse ante el Palacio
Presidencial.
El ex presidente taiwanés Lee Teng-hui, que irritó a China con su
postura en defensa de la identidad política taiwanesa, y la
presidenta del opositor e independentista Partido Demócrata
Progresista (PDP), Tsai Ing-wen, encabezaron la protesta.
"El AMCE es un paso hacia el mercado único chino y una
integración económica asimétrica que enjaula a Taiwán y tendrá
importantes consecuencias en todos los campos", dijo Tsai Ing-wen,
antes de iniciar la marcha.
Los independentistas taiwaneses desconfían de las concesiones
chinas en las negociaciones previas al acuerdo y Tsai asegura que
Pekín tiene otros motivos y que "su principal objetivo es la anexión
política de Taiwán".
"El problema del AMCE no está en la lista inicial de productos
con preferencia en tasas aduaneras sino en las consecuencias
estructurales a largo plazo del acuerdo y en el uso político que le
dé China", dijo Tsai.
En las negociaciones para el ACME, Taiwán logró preferencias
arancelarias para 539 productos con un valor de exportación a China
de 13.830 millones de dólares anuales, mientras que China consiguió
preferencias para 267 artículos con un valor de exportación de 2.860
millones de dólares anuales.
China ha accedido a no incluir en la lista inicial de productos
con preferencias los artículos de las 17 industrias taiwanesas que
sufrirían más la competencia china, pero el PDP señala que "eso
puede cambiar en el futuro".
No han faltado las guerras de cifras, mientras que el Gobierno
que asegura que el AMCE creará 260.000 puestos de trabajo y añadirá
un 1,7 por ciento al índice de crecimiento económico, la oposición
que predice la pérdida de 150.000 empleos.
Otras críticas opositoras se centran en una supuesta falta de
transparencia en las negociaciones, en el hecho de que la
supervisión del acuerdo no se deje a la Organización Mundial del
Comercio sino a un grupo bilateral chino-taiwanés.
La Oficina Presidencial, en respuesta a las críticas, señaló que
el AMCE no solucionará todos los males de Taiwán ni ahorrará una
reestructuración de las empresas, pero sí evitará la marginación en
el mercado chino ante la entrada en vigor de otros acuerdos de libre
comercio.
La economía taiwanesa depende mucho de las exportaciones y China
y Hong Kong absorben unos 100.000 millones de dólares anuales, más
del 40 por ciento del total de las exportaciones isleñas.
Las estadísticas oficiales muestran que desde 1991 hasta 2009,
los taiwaneses han invertido en China 82.700 millones de dólares y
los datos no oficiales elevan la cifra hasta los 150.000 millones de
dólares.
El Gobierno de Taiwán asegura que la firma del AMCE busca
normalizar e institucionalizar los lazos comerciales y de
inversiones, por eso tiene previsto sellar con China acuerdos de
protección de inversiones y de derechos de propiedad intelectual, y
acuerdos de libre comercio con otros países. EFE
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