Nueva York, 28 sep (EFE).- La agencia Moody's mejoró hoy la
calificación que asigna a la deuda soberana de Bolivia en moneda
extranjera y local, debido en parte a una reducción en los niveles
de confrontación política, aunque los considera aún "altos".
La agencia estadounidense elevó la calificación de la deuda al
nivel "B2", desde el "B3" y otorgó una perspectiva "estable" a esa
asignación, explicó en un comunicado de prensa.
El analista de Moody's Gabriel Torres manifestó que la revisión
al alza "refleja mejoras generales en los principales indicadores de
deuda de Bolivia y la reducción en todavía altos niveles de
confrontación política".
Añadió que años de crecimiento por encima de la media histórica y
los beneficios de la condonación de la deuda externa "han mejorado
significativamente" la mayoría de los indicadores crediticios de ese
país, a la vez que las reservas internacionales se acercan al 50 por
ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y los ahorros del Gobierno
exceden el diez por ciento.
Torres señaló que las diferencias políticas entre el Gobierno y
la oposición aún son grandes al acercarse las elecciones nacionales
de diciembre, "aunque la crisis política del año pasado ya cedió".
"Es probable que el sistema político sea puesto de nuevo a prueba
para resolver esas diferencias sin afectar la fortaleza de las
instituciones o la implementación de políticas públicas", manifestó
el analista.
Moody's señaló que la economía boliviana ha tenido un buen
comportamiento durante la crisis crediticia mundial, con un
crecimiento superior al seis por ciento en el año pasado, y aseguró
que probablemente será uno de los pocos países de la región que
registre avances en 2009.
La agencia estadounidense considera, no obstante, que el país
enfrentará retos para mantener las recientes tasas de crecimiento
debido a sus bajos niveles de inversión.
Señala además que aunque las cuentas fiscales sufrirán un
deterioro este año, el Gobierno tiene ahorros suficientes a su
disposición para limitar las fluctuaciones de ingresos y gastos,
gracias a tres años de superávit.
"Con un bajo riesgo de refinanciación de la deuda y mayores
reservas internacionales y ahorros, el país y el Gobierno se hallan
en buena posición para manejar las dificultades económicas y
financieras previsibles en el futuro cercano", manifestó Torres.
Sin embargo, el analista precisó que "preocupaciones de mediano
plazo en torno a la estabilidad política y el desarrollo económico
continuarán restringiendo las calificaciones a menos que sean
resueltas".
Torres señaló que Bolivia es uno de los países más pobres entre
aquellos que califica la agencia estadounidense y considera que su
bajo nivel de desarrollo económico es una limitación estructural
para las calificaciones.
La última vez que Moody's cambió la calificación de la deuda
boliviana en moneda extranjera y local fue el 16 de abril de 2003,
cuando la rebajó al nivel "B3" desde el "B1". EFE