México, 4 jun (EFE).- Los empleados de la aerolínea mexicana
Aviacsa, suspendida temporalmente el pasado martes, denunciaron hoy
que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) de México se
valió de "mentiras" e "ilegalidades" para argumentar una supuesta
falta de seguridad en los vuelos de esa empresa.
En sendos comunicados publicados en la prensa local los empleados
de la compañía pidieron al presidente mexicano, Felipe Calderón,
investigar a ese ministerio.
"Los argumentos usados en el documento de suspensión emitido por
la Secretaría de Comunicaciones, son todos ellos de los que no
afectan la seguridad ni aeronavegabilidad de la aeronave en su
operación", indicaron los pilotos, azafatas y demás trabajadores de
Aviacsa.
Según las autoridades mexicanas, después de inspeccionar los
aparatos de la compañía aérea, que emplea a 3.500 personas, se
encontraron irregularidades que representan riesgos para la aviación
y un peligro para la seguridad de los pasajeros.
La SCT dio a la aerolínea un plazo de 60 días para resolver las
anomalías detectadas.
La decisión afecta a 25 de los 26 aviones de la flota de Aviacsa,
la séptima aerolínea en el mercado nacional, que transportó en 2008
a 2,6 millones de pasajeros.
Aunque no implica la suspensión total de las operaciones de la
compañía, numerosos vuelos han sido cancelados desde entonces.
De acuerdo con los empleados inconformes, si la SCT empleara el
mismo criterio de evaluación con cualquier otra "aerolínea nacional
o internacional" se "afectaría con el cese de operaciones a la
mayoría de las aeronaves" de esas firmas.
En este sentido, pidieron a Calderón que el caso sea sometido a
una consultoría internacional, para lo que proponen a la
organización Veritas o a la línea aérea alemana Lufthansa.
"Deje usted (Calderón) que el mercado decida qué aerolínea debe
permanecer, por seguridad, calidad y libre competencia",
puntualizaron.
Además, argumentaron que la empresa, con 19 años en el mercado,
tiene "un nicho de negocio que no le afecta a las demás compañías".
Aviacsa dice que las autoridades sometieron a la empresa a varias
auditorías en abril y mayo de 2009 en las que se demostró que
cumplía con las normas internacionales de aeronáutica.
Según la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), la
determinación no tiene ninguna relación con las deudas que la
empresa tiene por uso del espacio aéreo con el organismo Servicios a
la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam), por 300
millones de pesos (unos 22 millones de dólares).
Además, Aviacsa debía otros 180 millones de pesos (unos 13
millones de dólares) por adeudos de combustibles, de los cuales ya
cubrió la mayor parte.
En los últimos meses las aerolíneas Avolar, Alma y Aladia
suspendieron sus operaciones de manera definitiva debido al
incremento de los costos del combustible, mientras que las empresas
Novair y Aerocalifornia fueron suspendidas debido a sus deudas. EFE