La economía alemana está preparada para la recuperación a pesar de los desafíos actuales como la alta inflación y las tasas de interés elevadas, según afirmó Joachim Nagel, presidente del Bundesbank.
En su intervención del miércoles, Nagel destacó que, aunque Alemania, la mayor economía de Europa, se enfrenta a su segundo año de declive económico, se prevé que esta tendencia negativa se invierta a medida que disminuyan los obstáculos temporales.
Nagel criticó a los medios de comunicación por presentar de manera excesivamente pesimista la situación económica de Alemania. Mantuvo la postura del Bundesbank de que la economía recuperará impulso una vez que se atenúen problemas como la débil demanda de otros países europeos.
No obstante, Nagel reconoció varios problemas estructurales que afronta Alemania, entre ellos los elevados precios del combustible, la excesiva burocracia y la escasez de mano de obra cualificada.
Para hacer frente a estos retos, abogó por reformas integrales. Entre los cambios propuestos se encuentran la implementación de un sistema de fijación de precios del carbono, la simplificación de la administración financiera, la atracción selectiva de trabajadores extranjeros y la mejora de los servicios de cuidado infantil para facilitar que más mujeres se incorporen al mercado laboral.
El presidente del Bundesbank también elogió la Iniciativa de Crecimiento del Gobierno Federal, pero subrayó que el éxito de los resultados depende de una implementación eficaz.
Señaló que, si bien el gobierno está supervisando áreas clave de la política económica, aún queda mucho trabajo por hacer.
Reuters contribuyó a este artículo.
Este artículo ha sido generado y traducido con el apoyo de AI y revisado por un editor. Para más información, consulte nuestros T&C.