MADRID (Reuters) - El consejero de Interior catalán destituido Joaquim Forn ha solicitado su salida de prisión preventiva alegando que ha asumido la aplicación del artículo 155 de la Constitución en Cataluña, el mismo día en que el exvicepresidente Oriol Junqueras solicitaba su excarcelación, en este caso sin manifestar si acataba la intervención de la región por el Gobierno central.
En el recurso de apelación presentado ante la Audiencia Nacional al que Reuters tuvo acceso, Forn se manifestó en una línea similar a la esgrimida el lunes por los también exconsejeros de la Generalitat Josep Rull y Jordi Turull, acerca del artículo que facultó al Gobierno central a aplicar medidas de intervención en Cataluña.
"(Forn) Asumió la nueva situación jurídica y cesó en el ejercicio de su función pública, sin aspavientos ni llamadas a la desobediencia", dijo el recurso de apelación del exconseller.
Ocho exmiembros del gobierno de la Generalitat se encuentran en prisión preventiva desde el pasado 2 de noviembre tras declarar por presuntos delitos de sedición, rebelión y prevaricación por hechos relacionados con el proceso que desembocó en la declaración unilateral de independencia de Cataluña el 27 de octubre.
En su recurso de apelación, el abogado argumentó que Forn, tras la aprobación del artículo 155 en el Senado, "acudió a la Consejería de Interior, reunió a todo el personal, se despidió del mismo, recogió todas sus pertenencias y no volvió más a dichas dependencias".
La defensa respondía así en su auto a uno de los motivos, la destrucción de pruebas, por los que la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela decretó la prisión preventiva para los ocho exconsejeros, que fueron cesados como parte de la intervención en Cataluña, que además de la destitución del Govern independentista supuso la convocatoria de elecciones.
En el escrito, la defensa de Forn también cuestionó la investigación por rebelión alegando que no existió uso de violencia, el "elemento imprescindible" para pueda existir tal delito, mientras que desmintió que exista riesgo de fuga ya que acudió a declarar cuando fue citado y su arraigo personal y familiar en Barcelona es total.
NI REUNIONES NI ACUERDOS
Este martes también trascendió que el vicepresidente cesado Junqueras ha solicitado también su salida de prisión provisional, pero sin manifestar una acatamiento explícito del 155.
Junqueras sostuvo no obstante que el Gobierno catalán "no se ha reunido desde el día de su cese" ni adoptado acuerdos de Gobierno.
La defensa alegó que el encarcelamiento del exvicepresidente está lesionando su derecho a la participación política en las elecciones del 21 de diciembre en Cataluña convocadas por el Gobierno central, unos comicios para los que Junqueras encabeza la lista provisional del grupo independentista de izquierdas ERC.
"No hay duda alguna de que los investigados son candidatos potenciales a las elecciones y que si no estuvieran privados de libertad tendrían una participación muy activa en la campaña electoral", concluyó el recurso.
Al igual que la candidatura desde Bélgica del destituido presidente Carles Puigdemont, la concurrencia a las elecciones de Junqueras desde la cárcel supone una situación inédita en la política española, que vive su peor crisis en décadas por las ambiciones independentistas en Cataluña.
No obstante, Junqueras ha apuntado recientemente en una carta desde la cárcel a su número dos en las listas de ERC, Marta Rovira, como futura presidenta de Cataluña, ante encuestas que dan a la formación como favorita para las elecciones de diciembre.