París, 11 feb (EFE).- El presidente de Renault, Carlos Ghosn,
dijo entender hoy la preocupación sobre el mantenimiento del empleo
en los países donde el grupo automovilístico está implantado, y dijo
que asumirán su "responsabilidad" en esa cuestión, a condición de
que se atienda a la competitividad de sus fábricas.
"Asumiremos nuestra responsabilidad a condición de que se tenga
en cuenta la competitividad", señaló Ghosn al referirse a las
polémicas sobre las garantías de que la producción se mantenga en
las plantas actuales, durante la presentación a la prensa de los
resultados anuales en París.
Preguntado sobre las presiones del Gobierno francés para que
Renault mantenga la producción en Francia y no la deslocalice a
otros países más baratos, dijo que "entendemos la preocupación" y
que están a favor de mantener el empleo local, y no sólo en Francia.
"El problema del reforzamiento de los empleos del automóvil es un
problema mundial" que "no se puede ignorar", como ha quedado en
evidencia con los diferentes programas gubernamentales de ayuda al
sector, cuyo objetivo exclusivo era apoyar el empleo en cada país.
"Estamos a favor, a condición de que eso vaya unido a la
competitividad", señaló antes de extenderse en el caso de Francia,
que a su juicio plantea problemas por la elevada fiscalidad y el
elevado volumen de cotizaciones sociales, y no porque los salarios
sean particularmente elevados.
A ese respecto recordó que para un coche de tipo Mégane de 14.000
euros, producirlo en Europa central u oriental le sale un 10% más
barato que hacerlo en Francia, y de esa diferencia, unos 750 euros
son imputables al diferencial en las cotizaciones sociales y 250 a
la tasa profesional.
Renault anunció hoy que este año reducirá sus efectivos mundiales
en unos 1.000 empleados, que se añadirán a los 7.000 eliminados en
2009, esencialmente en Europa dentro del programa de ajuste,
realizado sobre todo con la no sustitución de personas que se
jubilan y con salidas voluntarias.
La marca del rombo, frente a las tensiones con el Gobierno
francés en las últimas semanas quiso recordar que aunque la
producción de vehículos en Francia supone el 25% del total en
número, en valor añadido representan el 55%, debido a que son
modelos básicamente de gama alta y media. EFE