Sídney (Australia), 5 sep (EFE).- La economía australiana creció en 0,9 por ciento durante el segundo trimestre de 2018, lo que supone una expansión anual en junio del 3,4 por ciento, según datos oficiales.
Los resultados anunciados por la Oficina Australiana de Estadísticas (ABS, siglas en inglés) superan los pronósticos del Banco Australiano de la Reserva que esperaba un crecimiento del 3 por ciento.
El aumento del Producto Interior Bruto correspondiente a los meses de abril, mayo y junio de este año se debió a un incremento en la demanda doméstica (0,6 por ciento), impulsado por el crecimiento del consumo de las viviendas (0,7 por ciento), según un comunicado de la ABS.
"El crecimiento en la demanda doméstica representa más de la mitad del crecimiento en el PIB y refleja la fortaleza del gasto de los hogares", destacó el jefe economista de la ABS, Bruce Hockman.