Pekín, 12 abr (EFE).- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, dijo hoy en Pekín que su país desea ser socio comercial de China en cuanto a oportunidades de inversión en negocios, servicios e innovación.
Al clausurar hoy un seminario de negocios en el que casi 300 empresas brasileñas y chinas buscaron durante dos días oportunidades y eventuales socios, la presidenta afirmó que Brasil desea abrir un nuevo capítulo en su vínculo comercial con China "y dar un salto de calidad en nuestras relaciones".
"Es bueno que hasta ahora el comercio sea petróleo, soja o minerales, pero no basta. Brasil desea agregar valor a sus exportaciones hacia un comercio sostenido. Deseamos una relación más dinámica, sofisticada y equilibrada", reiteró.
Rousseff destacó la experiencia en programas de inserción social y reducción de la pobreza de Brasil, "justicia social que también busca China en su Plan Quinquenal", dijo.
En la audiencia estuvieron altos dirigentes políticos chinos, como el viceprimer ministro, Wang Qisham, y titulares de varios ministerios, entre ellos el de Comercio, Chen Deming, o empresariales, como los presidentes de los gigantes energéticos Sinopec, Fu Chengyu; State Grid, Liu Zhenya, o el Banco de Desarrollo de China, Chen Yuan.
Después, Rousseff se trasladó al Gran Palacio del Pueblo en la Plaza Tiananmen de Pekín para reunirse con su homólogo, Hu Jintao, que la recibió con la colorida y tradicional ceremonia de bienvenida reservada a los Jefes de Estado y el posterior banquete. EFE
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