Shanghái (China), 16 oct (EFE).- Londres se ha convertido en la primera ciudad fuera de China, después de Hong Kong, en ser autorizada por el país asiático al que sus empresas puedan invertir directamente en yuanes en las bolsas chinas, mediante uno de sus programas de cuotas para canalizar capital extranjero.
Dentro del llamado programa de Inversores Institucionales Extranjeros Calificados en Renminbi (RQFII), China adjudica así a las firmas radicadas en Londres una cuota máxima de 80.000 millones de yuanes (9.700 millones de euros, 13.118 millones de dólares).
El ministro británico de Finanzas, George Osborne, de oficial a China, aseguró que su "ambición es garantizar que Londres sea el centro para los negocios en yuanes en occidente", recoge hoy el diario oficial Shanghai Daily.
La capital británica se adelanta así a otras ciudades asiáticas que también aspiran a convertirse a medio plazo en centros mundiales del comercio en yuanes chinos, como Taipei y Singapur, mediante la extensión del programa RQFII que China inició en 2011 con Hong Kong.
La ampliación del programa a Londres parece estar enmarcada en los planes que anunció en enero la Comisión Reguladora del Mercado de Valores de China (CRMV) para seguir aumentando este año sus cuotas de inversión extranjera autorizada mediante los programas RQFII (en yuanes) y QFII (en dólares).
El programa de RQFII se inició en un principio en 2011 con una cuota máxima de 20.000 millones de yuanes de inversión extranjera posible en total (2.426 millones de euros, 3.208 millones de dólares), pero su cuota total mundial suma ahora ya 350.000 millones de yuanes (42.458 millones de euros, 57.394 millones de dólares)..
Con todo, sólo unos 134.000 millones de yuanes de esa cuota total autorizada han sido adjudicadas a inversiones concretas por el momento (16.255 millones de euros, 21.972 millones de dólares).
Londres aspira a convertirse en el principal centro mundial del comercio internacional en yuanes en occidente, mientras China tiene el objetivo de que Shanghái se consolide como un punto vital de las finanzas y el comercio mundial, con una influencia similar en la economía mundial a la de la capital británica o Nueva York para 2020.
Pekín está tratando de fomentar la internacionalización del yuan, que ya es la novena divisa más utilizada del mundo en el comercio internacional, y para hacerlo posible ha prometido que permitirá por primera vez su cambio de manera libre en la nueva Zona Piloto de Libre Comercio de Shanghái, inaugurada el pasado 29 de septiembre.
Los dos países firmaron un acuerdo en junio para facilitar el comercio bilateral permitiendo que sus bancos centrales pudieran cambiar 200.000 millones de yuanes por 20.000 millones de libras.
El propio Banco Central Europeo (BCE) llegó este mes a un acuerdo similar con el Banco Popular de China (central), con 350.000 millones de yuanes por 45.000 millones de euros, lo que hace pensar a algunos observadores que Fráncfort podría seguir a Londres como próximo destino de una cuota propia del programa RQFII.
Sólo el dólar, el yen, el dólar australiano y ahora la libra tienen un sistema de cambio directo con el yuan chino. EFE