SAO PAULO (Reuters) - La Corte Suprema de Brasil determinó el lunes la remoción de Renan Calheiros del cargo de presidente del Senado, después de que el alto tribunal lo acusó la semana pasada de recibir sobornos, dijo un portavoz judicial.
Calheiros será reemplazado el martes por el senador Jorge Vianna del izquierdista Partido de los Trabajadores, quien se opone a los recortes al gasto y podría bloquear las medidas para controlar un creciente déficit de presupuesto para restablecer la confianza en la mayor economía de América Latina.
El juez Marco Aurelio de Mello dictó una medida cautelar contra Calheiros sobre la base de una decisión mayoritaria del tribunal el mes pasado, por la cual ninguna persona procesada por un delito puede estar en la línea de sucesión presidencial.
El presidente del Senado es el segundo en la línea detrás del presidente de la Cámara baja, pues Brasil no tiene vicepresidente en este momento.
La decisión del juez debe ser presentada al pleno de la corte, que se espera que ratifique la medida el miércoles, debido a que seis de sus 11 miembros están a favor de la nueva norma de sucesión presidencial.
La remoción de Calheiros es un nuevo golpe para el gobierno del presidente Michel Temer, debilitado por escándalos de corrupción y que lucha por aprobar impopulares medidas de austeridad, incluido un límite al gasto federal que deberá ser sometido a votación en el Senado el 13 de diciembre.
"La decisión es una noticia terrible para Temer, porque pone el límite al gasto en riesgo, dado que el segundo al mando en el Senado es del Partido de los Trabajadores", dijo Leonardo Barreto, jefe de la consultora política Factual de Brasilia. "Esto puede retrasar la votación final y enviar una señal errónea a los mercados", agregó.
Calheiros rehusó comentar la decisión, pero su despacho dijo que dejaría su cargo en la mañana del martes cuando sea notificado oficialmente, momento en el que Vianna, vicepresidente de la Cámara alta, se convertirá en líder del Senado hasta febrero.
El Partido de los Trabajadores dijo que las medidas fiscales deberían postergarse hasta la nueva sesión el próximo año.
El líder oficialista en el Congreso, Romero Juca, dijo que la remoción de Calheiros no cambiaría los planes de votar el 13 de diciembre un tope al gasto federal durante 20 años.
(Reporte de Eduardo Simoes, escrito por Marcelo Teixeira y Anthony Boadle; Editado en español por Hernán García)