Dublín, 12 jul (.).- El principal peligro para la estabilidad financiera y para la economía general de Irlanda es un "brexit" sin acuerdo, pues provocaría un "un shock macroeconómico" más "duro de lo previsto", advirtió este viernes el Banco Central Irlandés (ICB).
El ICB lanzó ese aviso en su último informe trimestral, en el que aborda la incertidumbre que rodea la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), cuya nueva fecha límite está fijada para el próximo 31 de octubre.
Un "brexit" salvaje, señaló el banco emisor, sería el "desencadenante de un endurecimiento abrupto" de las "condiciones financieras globales" y provocaría "daños macroeconómicos" en Irlanda, lo que, en conjunto, tendría "efectos adversos" para, por ejemplo, el sector inmobiliario.
Tras el estallido de la burbuja y el colapso del sistema bancario irlandés en 2008, el sector lleva varios años recuperándose, pero el precio de la vivienda podría desplomarse de nuevo si Londres rompiera con la UE de manera desordenada.
El ICB recordó que, en los últimos años, fondos de inversión domésticos y foráneos han adquirido extensos portafolios inmobiliarios para invertir en el sector del alquiler, lo que ha elevado los precios y, al mismo tiempo, está dejando fuera del mercado a un número importante de compradores de primeras viviendas, según ha reconocido el propio Gobierno.
En el contexto de un "brexit" sin acuerdo, la crisis posterior provocaría, por un lado, un aumento del desempleo en Irlanda y, por otro, la salida precipitada del mercado inmobiliarios de los citados fondos inversores, dos factores que contribuiría a una marcada caída del precio de la vivienda, expuso el ICB en su informe.
La entidad reguladora irlandesa estima que un divorcio entre Londres y Bruselas a las bravas podría restar hasta seis puntos porcentuales a la tasa de crecimiento de este país durante los próximo dos años.
Tanto el ICB como la Oficina Central de Estadísticas (CSO) han indicado que el producto interior bruto (PIB) creció en torno al 8 % en 2018, casi el 2 % más de lo estimado anteriormente, si bien sus pronósticos para este año son más modestos y prevén que la economía podría crecer el 4,3 % debido al "brexit".
Además de este divorcio, el ICB advierte de que el sector financiero nacional también deberá hacer frente a los riesgos que presentan otros "acontecimientos externos", como la guerra comercial entre EE.UU. y China, que podrían provocar un "ajuste repentino" de las "condiciones financieras globales" y el "resurgir de preocupaciones sobre la deuda soberana" en la zona euro.
De todas maneras, el informe destacó que, después de la última gran crisis, el sistema bancario irlandés está "mejor preparado" para "absorber los shocks", en lugar de "amplificarlos", como sucedió en el pasado.