Madrid, 25 oct (.).- La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha asegurado que la posición del Gobierno respecto a la reforma laboral es unánime, que el presidente ha sido "tremendamente claro" al respecto y que "aquí no cabe ninguna consideración individual o personal".
En rueda de prensa conjunta con el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, la vicepresidenta ha incidido además en el compromiso de hacer la reforma en el marco del diálogo social con patronal y sindicatos para lograr una legislación eficaz y duradera.
"Vamos a trabajar sobre la base del diálogo social para lograr un acuerdo equilibrado que acabe con la precariedad y garantice la competitividad, con la necesaria compaginación con la creación de empleo", ha afirmado la vicepresidenta.
A ello ha sumado el reequilibrio de la negociación colectiva, aunque sin concretar si está a favor de recuperar la prevalencia de los convenios sectoriales o si es más partidaria de mantener la prioridad de los convenios de empresa, como hoy ha reclamado el gobernador del Banco de España.
Calviño ha insistido en que "ahora se inicia la fase decisiva de la negociación para tenerla adoptada antes de final de año", en referencia a la puesta en común de las diferentes cuestiones que se han venido negociando por separado con Trabajo, Inclusión, Hacienda o Educación.
Ese ámbito supraministerial será la mesa de diálogo social del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, presidida por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, o por Calviño en su ausencia.
Esta mesa "está por encima para garantizar la articulación de todas las reformas" comprometidas con Bruselas para el desembolso de los fondos de recuperación, ha subrayado Calviño, que considera "importante que la visión de todos esté representada en la posición del Gobierno".
"El Gobierno tiene que hablar con una sola voz, lo importante es que se exprese la posición del Gobierno y que haya una buena cooperación en ello", ha asegurado.