Bruselas, 3 oct (.).- Los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (el Eurogrupo) debatirán mañana sobre el aumento de la inflación, que alcanzó el 3,4 % en septiembre, y la reciente escalada de los precios de la energía, que empuja al alza este indicador y preocupa a varios países comunitarios en vísperas del invierno.
España, donde el precio de la electricidad ha batido un récord tras otro en las últimas semanas, ha pedido soluciones a la Comisión Europea y empujado para europeizar la cuestión, que será abordada por los líderes de la Unión Europea en su cumbre del 21 y 22 de octubre.
El Eurogrupo, al que asistirá la vicepresidenta económica Nadia Calviño, se centrará en analizar el impacto de la subida en la inflación, el crecimiento y los presupuestos nacionales para 2022.
IMPACTO EN LA RECUPERACIÓN
"Desde una perspectiva económica, unos precios de la energía más altos tienen el potencial para ralentizar la recuperación", dice el documento sobre el que debatirán los ministros.
Los técnicos recuerdan que la energía es uno de los costes más prominentes para empresas y hogares y que las estimaciones sobre su precio son elementos fundamentales a la hora de elaborar los presupuestos, sobre todo dada la "reciente volatilidad".
El aumento de los mismos, añaden, podrían tener un "impacto desproporcionado" sobre los grupos con menos ingresos y los hogares más antiguos.
Con este telón de fondo, la reunión servirá para poner sobre la mesa las respuestas que contempla cada Estado, desde dejar que el mercado siga su dinámica hasta intervenir para suavizar los precios, y ver si hay puntos en común.
"La discusión será sobre cuáles son las mejores medidas para lograr los objetivos sociales sin perturbar el funcionamiento del mercado energético", apunta una alta fuente comunitaria, subrayando que las opciones son "muy diferentes".
En general, recuerda el documento sobre el que se debatirá, la respuestas dependerán de si la escalada de precios es temporal o permanente -en cuyo caso tendría mayor impacto sobre la inflación y el crecimiento- y de si responde a un problema de oferta, dónde se podría actuar con inversiones, o de demanda, que podría ser gestionado con subsidios o medidas fiscales.
SOLUCIONES EUROPEAS
Aunque no se esperan resultados operativos concretos a corto plazo, España considera "muy importante" que la cuestión se aborde a nivel europeo y se busquen soluciones comunes ante un "reto" cuyo impacto en términos de "inflación", "desigualdad", "transición ecológica" o "dependencia estratégica" tiene una importante dimensión europea, según explican fuentes del Ministerio de Economía.
En las últimas semanas, varios países han pedido a la Comisión que explore soluciones ante la subida generalizada de los precios, que ya ha llevado a algunos Estados a adoptar medidas nacionales.
España aboga por centralizar las compras de gas natural en la UE para reducir la exposición a la volatilidad en los mercados energéticos, una idea secundada por Italia, que pide además explorar soluciones en materia de reservas energéticas.
Por su parte, Francia ha pedido en una carta al Ejecutivo comunitario, a la que tuvo acceso Efe, que analice el incremento de precios en cada país y su impacto económico y, a medio plazo, estudie medidas más estructurales para limitar la volatilidad del mercado eléctrico, gestionar el almacenamiento de gas y aumentar la independencia energética.
De momento, la Comisión solo se ha comprometido a presentar una lista de las medidas que pueden adoptar los países para matizar el incremento de precios conforme a la legislación vigente, que incluirían actuar sobre el IVA y otros impuestos, ayudas directas a los consumidores o medidas temporales para hogares y pequeñas empresas, entre otros.
En el alza de la electricidad influyen el aumento de los precios del gas, del 170 % en la UE en lo que va de año, el descenso de las reservas y, en menor medida, el incremento del precio de los derechos de emisión de CO2.
De media el precio de la electricidad subió casi un 80 % en la UE en el primer trimestre del año y, desde entonces, no ha dejado de crecer.
DUDAS SOBRE LA INFLACIÓN
Este incremento es uno de los principales factores que explican la otra escalada que abordará el Eurogrupo, la de la inflación, que ha subido sin pausa desde inicios de año, superando ya el 2 % que tiene como objetivo el Banco Central Europeo.
El BCE asegura que se trata de un incremento temporal, fruto también de la recuperación económica y de la escasez de ciertas materias, que irá disipándose el año próximo, de modo que la inflación cerrará este año en el 2,2 % y bajará al 1,7 % en 2022.
Sin embargo, cada vez hay más dudas de que así sea y el propio emisor reconoce que hay riesgos "limitados" de que el aumento sea mayor de lo previsto.
Una inflación alta durante mucho tiempo podría aumentar los gastos para las empresas y para los Estados, que tendrían que adaptar salarios y prestaciones al mayor coste de vida, así como elevar los costes de financiación en un momento en que la eurozona no ha completado su recuperación tras la pandemia.