París, 31 ago (.).- El producto interior bruto (PIB) de Francia aumentó un 1,1 % en el segundo trimestre después de haberse estancado en el primero, según el Instituto Nacional de Estadística (INSEE), que hace un mes había estimado un crecimiento inferior, del 0,9 % entre abril y junio.
En un comunicado, el INSEE explicó que con la progresión del segundo trimestre, el PIB recupera una cuarta parte del retroceso que todavía mantenía a finales de 2020 con respecto a su nivel precrisis y se quedó un 3,2 % por debajo del que hubo en el cuarto trimestre de 2019.
El incremento entre abril y junio se basó, sobre todo, en la demanda interior, que aportó 1,2 puntos de PIB. En particular, gracias a la inversión, que experimentó un alza del 2,4 %, después de un pequeño crecimiento del 0,4 % entre enero y marzo.
El consumo de los particulares también tuvo una contribución netamente positiva, con una subida del 1 % en el segundo trimestre. No obstante, el consumo se mantuvo muy por debajo del nivel anterior al estallido de la crisis del coronavirus (-5,9 % respecto al cuarto trimestre de 2019).
Las importaciones entre abril y junio progresaron en el segundo trimestre (1,7 %) a un ritmo superior al de las exportaciones (1 %) y tuvieron una contribución negativa sobre el PIB (restaron dos décimas).
El Gobierno francés ha revisado al alza durante el verano sus expectativas sobre la economía francesa en 2021. El ministro de Economía y Finanzas espera un crecimiento del 6 % en el conjunto del ejercicio y alcanzar en el cuarto trimestre el nivel de actividad previo a la crisis.