Ginebra, 1 dic (.).- Credit Suisse (SIX:CSGN) anunció hoy que su junta directiva ha propuesto a los accionistas el nombramiento de Antonio Horta-Osório como nuevo presidente del grupo bancario, una decisión que se prevé sea confirmada en la asamblea anual del próximo 30 de abril .
Horta-Osório (56 años) deberá suceder a Urs Rohner, cuyo retiro en 2021 ya había sido comunicado en vista de que cumple el término de doce años fijado por los estatutos del banco.
Rohner fue elegido miembro de la junta directiva en 2009, cuando el banco afrontaba las consecuencias de la crisis financiera que había estallado el año anterior y que fue causada por las inversiones extremadamente especulativas que la banca había hecho en el sector inmobiliario de Estados Unidos, un evento que tuvo un fuerte impacto en el banco suizo.
Este directivo se convirtió en presidente de Credit Suisse en 2011, momento en el cual el banco había entrado en una amplia reestructuración.
El presidente propuesto, de nacionalidad portuguesa, es actualmente consejero delegado del banco Lloyds (LON:LLOY), que a su vez anunció que Horta-Osório será reemplazado por Charlie Nunn, procedente del HSBC.
Horta-Osório empezó su carrera en 1987 en el Citigroup (NYSE:C) en Portugal, pasó por el banco de inversiones Goldman Sachs (NYSE:GS) y en 1993 se incorporó al Grupo Santander (MC:SAN), donde tuvo distintas responsabilidades, entre ellas la de director ejecutivo de este banco en el Reino Unido.
Su partida del Santander se produjo en 2011 para pasar al Lloyds, considerado uno de los banco británicos más importantes.
En un comunicado emitido por el Credit Suisse, Horta-Osório ha expresado su satisfacción por la nominación y su voluntad de trabajar con la junta directiva y el equipo de gestión para seguir construyendo en función de las diversas fortalezas del grupo.
Credit Suisse dijo que es probable que tenga que pagar unos 680 millones de dólares por un litigio en Estados unidos que data de 2009 y que tiene relación con un tipo de títulos hipotecarios considerado como responsable de la crisis financiera de hace doce años.
El banco sostuvo que aunque tiene motivos fundados para apelar ha hecho una provisión de 300 millones de dólares en relación con este caso.