La nueva variante del coronavirus amenaza con ralentizar el crecimiento económico mundial. Así lo ha indicado la OCDE, añadiendo que ahora la prioridad económica es la vacuna y exhortando a acelerar el ritmo de distribución de las dosis. La organización, además, ha añadido que los países del G20 utilizaron para proteger sus economías una cantidad 200 veces mayor de lo que costaría inmunizar a todo el mundo.
Salvo en el caso de Japón, cuyo PIB se prevé que suba más de un punto y medio, el resto de grandes potencias verá como el próximo año el crecimiento de su economía mengua. En el caso de la Unión Europea, el descenso sería de menos de un punto, Los casos con descensos más pronunciados son los de Brasil y China.
Además la OCDE ha rebajado dos décimas su previsión de crecimiento en el mundo para este año, hasta el 5,6%. El principal riesgo, señala, es la inflación en los 37 países que forman la organización, que estaría cerca del 5% y no disminuiría al 3% hasta 2023.