Washington, 8 jun (.).- La perspectiva económica de Paraguay a "mediano" plazo es favorable, pero es necesario que el país implemente reformas para que se mantenga estable, concluyó este jueves el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En un comunicado, donde se detallan los hallazgos de la primera revisión del Instrumento de Coordinación de Políticas (PCI, en inglés) para Paraguay, implementado en noviembre de 2022, el FMI recomendó al país tomar medidas para reducir la acumulación de deuda pública.
Como herramientas para lograr ese objetivo, el fondo propuso al Gobierno suramericano tomar acciones para "contener las pérdidas del fondo de pensiones de la Caja Fiscal y los riesgos financieros contingentes que emanan de los fondos de pensiones no supervisados".
Para la organización multilateral, con sede en Washington, es crucial que Paraguay mantenga "políticas fiscales sólidas y creíbles" para que se pueda mantener el favorable escenario económico actual.
"Se proyecta que el sistema bancario permanezca estable, siempre y cuando se siga ejerciendo una supervisión sólida y los bancos preserven salvaguardias internas adecuadas", señala el comunicado.
A su vez, el FMI sugirió al Gobierno paraguayo que se aprueben reformas para "modernizar las instituciones públicas, incrementar la eficacia del gobierno, controlar la corrupción" y mejorar el clima para el sector privado.
La primera revisión del PCI, no obstante, encontró que el desempeño del programa de dos años aprobado para Paraguay es "satisfactorio" y que se han alcanzado "casi todas las metas".
El FMI destacó que el país respondió de manera eficaz y adecuada a los "shocks externos" que experimentó su economía en 2022, como el descenso de exportaciones provocado por la fuerte sequía y el aumento en los precios de la energía y los alimentos que golpearon el mercado global.
El pasado 22 de noviembre el Directorio Ejecutivo del FMI aprobó este programa de dos años de apoyo técnico a Paraguay, a cambio de una serie de reformas macroeconómicas y estructurales.
El PCI es un mecanismo para ayudar a los países a formular y aplicar programas de política macroeconómica que puede ayudarles a desbloquear financiación por parte de acreedores oficiales o inversores privados.