Por Tom Wilson y Andrew Galbraith
LONDRES/SHANGHÁI, 11 jun (Reuters) - Las bolsas subían el viernes y los rendimientos de los bonos retrocedían tanto en Estados Unidos como en Europa, ya que los inversores quitaron hierro a la subida de los precios al consumo en Estados Unidos, aunque persisten los temores a la inflación a largo plazo.
El Euro STOXX 600 sumaba un 0,3% para alcanzar un máximo histórico y se encaminaba a un sexto día consecutivo de ganancias. Las acciones londinenses ganaban un 0,6%, ayudadas por una subida del 1% del sector minero, mientras que París subía un 0,4%.
También mejoraba el optimismo en Europa el hecho de que el Banco Central Europeo elevara el jueves sus previsiones de crecimiento e inflación, al tiempo que prometió un flujo constante de estímulos por ahora.
El índice mundial de acciones MSCI, que sigue las acciones de 49 países, ganaba un 0,1%. Los futuros de Wall Street se mantenían planos.
El índice de precios al consumo de Estados Unidos registró el jueves su mayor subida interanual desde agosto de 2008, del 5%, tras el aumento del 4,2% de abril. Las fuertes contribuciones de las subidas a corto plazo de los precios de los billetes de avión y de los coches usados, hicieron que los economistas pensaran que podría tratarse de un efecto transitorio.
La subida del índice de precios al consumo en Estados Unidos se debería, por tanto, a cuestiones coyunturales a corto plazo, relacionadas con la reapertura de la economía, según los analistas. Por ello, muchos inversores confían en que la Reserva Federal esté manejando hábilmente un repunte del crecimiento económico, aunque su definición de "transitorio" sigue sin estar clara.
Al mismo tiempo, los datos del Departamento de Trabajo de Estados Unidos mostraron la semana pasada el nivel más bajo de nuevas solicitudes de subsidios de desempleo en casi 15 meses.
Las bolsas estadounidenses subieron a máximos históricos tras los datos, y los rendimientos del Tesoro estadounidense a 10 años también cayeron a mínimos de tres meses.
Los agentes del mercado afirmaron que las preocupaciones por la inflación se han desvanecido en el último mes, aunque el espectro de una gran presión a largo plazo se mantiene.
"Los mercados parecen estar tomando la palabra de la Fed, pero cuando hablamos con los clientes hay preocupación por la inflación a largo plazo", dijo Kiran Ganesh, jefe de multiactivos de UBS (SIX:UBSG) Global Wealth Management en Londres.
Los rendimientos de los bonos de la zona del euro seguían la tendencia de caída el viernes, con los rendimientos alemanes a 10 años a punto de sufrir su mayor caída este año. Los rendimientos se mueven de forma inversa a los precios. [L5N2NT1DM]
El índice MSCI de acciones de la región Asia-Pacífico (sin Japón) subía un 0,4%.
CURVA APLANADA
El repliegue del temor a una subida de la inflación que conlleve un endurecimiento temprano de las medidas de la Fed provocó un aplanamiento de la curva de rendimiento de Estados Unidos, con el diferencial entre el rendimiento a 10 años y a 2 años en su punto más estrecho desde finales de febrero el viernes.
Los rendimientos del Tesoro a 10 años se situaban el viernes en el 1,4418%, camino de la mayor caída semanal en un año. El rendimiento a 30 años alcanzó el 2,1270%, el más bajo desde el 26 de febrero.
Los inversores afirmaron que los rendimientos probablemente volverán a subir a medida que las economías se reabran tras los confinamientos por el coronavirus.
"Seguimos pensando que los consumidores van a ayudar a que los precios suban, cuando estas economías se reabran adecuadamente, que la gente pueda empezar a viajar de nuevo, a gastar de nuevo", dijo Jeremy Gatto, gestor de carteras de Unigestion.
"Vamos a recibir un nuevo impulso por el lado del consumo, y por tanto esperamos que los rendimientos de los bonos suban"
El dólar estadounidense caía a medida que los rendimientos disminuían. Frente a una cesta de divisas, caía ligeramente hasta los 90,045, dentro del rango de cotización relativamente estrecho de esta semana y con una ligera bajada en el conjunto de la semana.
El compromiso del BCE de mantener su elevado ritmo de compra de bonos mantenía al euro en 1,2185 dólares.
(Información de Tom Wilson en Londres y Andrew Galbraith en Shanghai; información adicional de Sujata Rao Edición de Shri Navaratnam, Kim Coghill y Elaine Hardcastle, traducido por Tomás Cobos)