París, 27 nov (EFE).- El ministro francés de Economía, Emmanuel Macron, planteó hoy la idea de que una parte del programa de inversiones lanzado por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, salga de aportaciones de los Estados que no se contabilizarían en los criterios de deuda del Tratado de Maastricht.
Se trataría de que los países pudieran poner dinero obtenido de la emisión de deuda que no contaría para el cumplimiento de las reglas del Pacto de Estabilidad y Crecimiento sobre los límites a los números rojos de las cuentas públicas, explicó Macron en una conferencia de prensa conjunta con su homólogo alemán, Sigmar Gabriel.
Los dos ministros presentaron un informe que habían encargado al economista francés Jean Pisani-Ferry y al alemán Henrik Enderlein, en el que ambos apoyan la idea de la creación de un fondo con la misión de estimular las inversiones privadas para el plan de Juncker de 315.000 millones de euros, y que en parte se alimentaría de contribuciones de los Estados miembros.
Macron se mostró a favor e hizo notar que sería una forma de emitir deuda pública común.
"Tenemos que llevar a cabo juntos un programa de inversiones europeas" y "financiar rápido proyectos reales", señaló.
Francia se ha enzarzado en un pulso en las últimas semanas con la Comisión Europea porque ha señalado que va a retrasar su compromiso de reducir el déficit público por debajo del umbral del 3 % del producto interior bruto (PIB) fijado en el Pacto de Estabilidad.
El presidente francés, François Hollande, se ha embarcado en un plan de recorte del gasto público en 50.000 millones de euros en los tres próximos años, pero ha insistido en que no irá más lejos.
Gabriel, por su parte, dijo que su país no cree que vaya a poder movilizar "a corto plazo" más allá de los 10.000 millones de euros que ya ha anunciado para inversiones, pero defendió repetidamente el programa de Juncker.
Hizo hincapié en que el problema en Alemania es la carencia de inversiones privadas, y también que en las próximas semanas se tienen que examinar los proyectos del plan europeo para no invertir "a ciegas".