(Actualiza la hora de la reunión entre Papadimos y los líderes de los partidos políticos, que se ha atrasado)
Atenas, 7 feb (EFE).- El Gobierno de Atenas y la "troika" (FMI, Banco Central Europeo y Comisión Europea) han llegado a un principio de acuerdo sobre los recortes exigidos para que el país reciba un nuevo préstamo internacional, dijo hoy a Efe una fuente del Ejecutivo griego.
Sin embargo, aún falta que los líderes de los partidos políticos que forman el gabinete de coalición -socialdemócratas, conservadores y ultraderecha- den su visto bueno, cuando a partir de las 22.30 hora local de hoy (20.30 GMT) se reúnan con el primer ministro griego, Lukás Papadimos.
La reunión estaba inicialmente prevista para las 19.00 GMT pero los encuentros que también mantiene Papadimos con representantes de los bancos tenedores de deuda se están alargando más de lo previsto.
"De momento es sólo un borrador de acuerdo; hasta que no reciba el visto bueno de los líderes políticos no podemos considerarlo cerrado", indicó la fuente.
Se trata de un paquete de medidas adicionales de ahorro exigido para que Grecia obtenga un nuevo crédito, de al menos 130.000 millones de euros, que evite su bancarrota.
A un eventual plácet de los líderes políticos seguiría mañana su aprobación en Consejo de Ministros y una tramitación de urgencia en el Parlamento.
No obstante, diputados de los partidos en el Gobierno ya han mostrado su rechazo a las nuevas medidas de austeridad exigidas por la "troika".
De acuerdo a los medios griegos, éstas serían una rebaja de entre el 20 y el 25 % del salario mínimo (actualmente 751 euros brutos), recortes del 20 % de las pensiones por encima de 1.000 euros y una disminución sustancial de los complementos que superen los 150 euros en todas las pensiones.
Además, incluye los despidos de 15.000 funcionarios y de personal con contratos no fijos, drásticos recortes de los salarios en las empresas públicas y privatización inmediata de éstas, liberalización de las profesiones "cerradas" (como taxistas o notarios) y abolición de los convenios colectivos.
La "troika" ha advertido de que, si no se ratifican estas medidas, no habrá un nuevo préstamo de 130.000 millones de euros y tampoco permitirá que se proceda con la quita de la deuda pactada entre Grecia y los bancos privados.
Sin préstamo y sin quita, Grecia se encaminaría hacia la bancarrota el próximo 20 de marzo, cuando debe desembolsar 14.400 millones de euros en vencimientos de deuda, de los que ahora mismo carece.
Un diputado del gobernante PASOK, Jristos Magkuris, anunció hoy que no votará a favor de las medidas de la "troika" cuando sean sometidas a tramitación parlamentaria: "prefiero la pobreza a la humillación y la esclavitud".
Alexis Tsipras, líder del quinto partido en el Parlamento, el izquierdista SYRIZA, dijo que una quiebra desordenada de Grecia -el escenario más temido por los mercados y la Unión Europea- "es una opción" porque, de este modo, no serían sólo los griegos los que asumiesen todo el daño, sino también "los bancos y Alemania". EFE