Madrid, 21 nov (EFE).- El Gobierno evita por el momento plantear la posibilidad de vetar el presupuesto de la Unión Europea (UE) para el periodo 2014-2020, pese a considerar inasumible la propuesta presentada por el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y ha recabado el apoyo del Parlamento para negociar en Bruselas.
Ese respaldo ha sido trasladado por los portavoces de los grupos parlamentarios al secretario de Estado para la UE, Íñigo Méndez de Vigo, en su comparecencia ante la comisión mixta para la Unión Europea con el fin de informar de la posición española ante el Consejo Europeo de mañana en Bruselas
Un Consejo extraordinario en el que los jefes de Estado y de Gobierno van a intentar acercar posturas ante las perspectivas financieras para el sexenio 2014-2020 pese a las grandes diferencias existentes.
Méndez de Vigo, que ha agradecido el apoyo recibido, ha reiterado el rechazo de España a la propuesta planteada por Van Rompuy y que reduce en unos 80.000 millones de euros la planteada inicialmente por la Comisión Europea.
A su juicio, la de Van Rompuy no es equitativa y asume las tesis de los países que desean seguir reduciendo sus aportaciones.
"Es insuficiente, no va en la buena dirección", ha reiterado antes de expresar sus quejas, especialmente, por la reducción en las partidas destinadas a agricultura y fondos de cohesión para las regiones.
Pese a ello, en declaraciones a los periodistas antes de su comparecencia ha asegurado que España mantendrá una actitud constructiva en la negociación y no amenaza con un posible veto, algo que ha recordado que puede hacer cualquier país.
Méndez de Vigo, que ha detallado la propuesta de Van Rompuy, ha subrayado que no se debe abordar este proceso con prisas.
Sí ha asumido que el techo de gasto que fijó la Comisión Europea va a ser menor, porque, al menos, hay siete Estados que así lo desean, pero ha dicho que de lo que se trata es que se rebaje lo menos posible y que se aborde con un sentido más equitativo.
Méndez de Vigo ha recordado que en el Consejo de mañana se abordará también el nombramiento del luxemburgués Yves Mersch como miembro del Comité Ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE), y que ha sido bloqueado por España.
España pretendía que Antonio Sáinz de Vicuña accediera al órgano de gobierno del banco, tras la salida del mismo de José Manuel González Páramo, pero los ministros de Economía y Finanzas de la UE recomendaron el nombramiento de Mersch y defendieron para ello un procedimiento que rechaza el Gobierno y que hacía innecesario su debate en un Consejo Europeo.
El veto de España ha obligado a llevar este asunto al Consejo de mañana, y aunque es consciente de que ahí prosperará el aval al candidato luxemburgués, Méndez de Vigo ha defendido la posición española.
También ha recordado que el Parlamento Europeo se mostró contrario a este nombramiento en protesta por la ausencia de mujeres en las altas instancias del BCE.
En nombre del grupo socialista, el diputado Juan Moscoso se ha sumado a los argumentos del secretario de Estado, ha coincidido en que el planteamiento de Van Rompuy es insuficiente y ha invitado a fijar 'líneas rojas' en materia de fondos destinados a la agricultura y a las regiones que reciben ayudas comunitarias.
Eva Parera, senadora de CiU, y Joan Sabaté, de la Entesa en el Senado, han fijado igualmente como prioridad intentar mantener el máximo de fondos posibles para la agricultura y las regiones, y el también senador del PNV Iñaki Anasagasti ha defendido que España haga frente con otros países como Italia.
La diputada de UPyD Irene Lozano ha expresado su respaldo al Ejecutivo ante una "endiablada" negociación, mientras que el portavoz del PP en la comisión, el diputado Rubén Moreno, ha considerado que el proyecto de presupuesto no es el mejor ni para España ni para la UE. EFE