Víctor Martín
Nueva York, 14 jun (EFE).- La fuerte rebaja de la calificación
que otorga Moody's a los bonos del Estado griego, hasta el nivel
"basura", enfrió hoy el ánimo comprador en Wall Street, que hasta
ese momento parecía dispuesta a ampliar las ganancias de la pasada
semana.
Los principales indicadores del mercado neoyorquino mostraron una
sólida tendencia alcista en las primeras horas de negocio, en
paralelo con la senda positiva en que se movían las bolsas europeas
y el tono positivo que había prevalecido también en Asia.
Los inversores acogieron con optimismo el crecimiento del 0,8%
que registró la producción industrial en la eurozona en abril con
respecto a marzo, un dato más favorable de lo esperado, y que sitúa
en el 9,5% el avance registrado con respecto al año anterior.
Con ello, se reavivó un cierto optimismo acerca de una mejora de
la actividad en esa región y en otras áreas económicas y contribuyó
a que se revalorizaran en el mercado neoyorquino las acciones de
algunas empresas del sector industrial y de equipamiento y
maquinaria, incluida Caterpillar (1,28%), que encabezó el grupo de
componentes del Dow que cerraron en positivo.
También sirvió para que el euro recuperara vigor ante el dólar,
lo que tiende a favorecer la inversión en valores bursátiles.
Con ese escenario de fondo y la ausencia de datos relacionados
con la actividad económica en Estados Unidos, todo parecía indicar
que podía ampliarse con holgura el alza del 2,81% que había
conseguido el índice Dow Jones durante el conjunto de la pasada
semana, así como los avances del 2,51% y del 1,1% que consiguieron
el S&P 500 y el Nasdaq, respectivamente.
Sin embargo, el tono negociador en Wall Street se volvió mucho
más cauteloso después de que Moody's anunciara que bajaba en cuatro
escalones, de A3 a Ba1, la calificación que otorga a la deuda de
Grecia.
Esa decisión la tomó después de evaluar los beneficios y los
riesgos que puede conllevar el programa de ayudas aprobado meses
atrás por los socios europeos de Grecia y por el Fondo Monetario
Internacional (FMI).
Tras esa decisión, y al igual que ha ocurrido en otras sesiones
recientes, esta primera jornada de la semana se volvió más incierta
y variable a medida que se aproximaba el cierre.
Finalmente, los principales indicadores bursátiles de Nueva York
no lograron mantener la sólida tendencia alcista de las horas
previas.
El Dow Jones de Industriales cerró finalmente con un descenso del
0,2% (-20,18 puntos) y finalizó en 10.190,89 unidades, en tanto que
el selectivo S&P 500 bajó el 0,18% (-1,97 puntos), hasta los
1.089,63 puntos.
El índice compuesto que mide la evolución del mercado Nasdaq,
también con sede en Nueva York y donde cotizan muchas empresas
tecnológicas y de internet, cerró sin embargo con un alza del 0,02%
(0,36 puntos) que le permitió cerrar en 2.243,96 unidades.
Los títulos de la petrolera británica BP que se negocian en la
bolsa neoyorquina volvieron a sufrir un fuerte correctivo y
perdieron un 9,71% de su valor, tras conocerse que ha gastado ya
1.600 millones de dólares en las operaciones para contener el
vertido de crudo en el Golfo de México.
Mientras la Casa Blanca sigue presionando para que asuman
responsabilidades por el desastre, aunque el presidente del Gobierno
estadounidense, Barack Obama, adoptó hoy un tono optimista durante
su cuarta visita al Golfo de México.
Los inversores conocerán durante esta semana más datos
relacionados con la producción industrial, la construcción de
viviendas en Estados Unidos y la evolución de los precios a nivel de
productor y de consumidor, todos relativos a mayo, que pueden
definir la dirección del mercado bursátil en las próximas sesiones.
EFE