Nueva York, 14 dic (EFE).- El economista Nouriel Roubini, conocido por predecir la última crisis económica, auguró hoy que el crecimiento de la economía mundial continuará siendo lento en 2011, pero que gracias a las medidas de estímulo económico el riesgo de una recaída en recesión se ha reducido significativamente.
Roubini, profesor de economía en la Universidad de Nueva York y presidente de la consultora Roubini Global Economics, presentó hoy sus previsiones sobre la marcha de la economía mundial para el año que viene en las oficinas de esa firma en Nueva York.
Según este experto, famoso por sus pesimistas postulados, la economía global crecerá en 2011 una media del 3,9%, mientras que los países desarrollados avanzarán un 2,1% y los que están en vías de desarrollo lograrán un crecimiento del 6,3% en conjunto.
"La buena noticia para las economías avanzadas es que el riesgo de una recaída en la recesión se ha reducido significativamente, gracias en parte a la compra masiva de bonos del Tesoro, las medidas de estímulo fiscal y los últimos datos macroeconómicos mejor de lo esperado en países como Estados Unidos", afirmó Roubini.
Sin embargo, el estadounidense avisó de que, "a pesar de que somos optimistas sobre Estados Unidos, este país podría sorprender en el lado negativo".
Entre los problemas que destacó sobre la primera potencia mundial, para la que predijo un crecimiento en 2011 del 2,7%, enumeró la recaída del mercado inmobiliario, la crisis del crédito, la alta tasa de desempleo y "la inacción" para solucionar los problemas fiscales.
El economista prevé que el Congreso de Estados Unidos no tome medida alguna para atajar los problemas fiscales el año que viene por falta de consenso y que tampoco se haga nada en 2012 "porque es año de elecciones", por lo que "quien se convierta en presidente de este país en 2013 tendrá que tomar estas medidas".
Por ello, Roubini advirtió de que, "finalmente, el mercado de deuda se podría despertar como lo hizo en Europa, disparar la rentabilidad de los bonos y acabar con la recuperación".
A juicio de este estadounidense de origen turco, tan solo supera al riesgo de una "mala sorpresa" en Estados Unidos el "significativo peligro de un desorden en Europa".
"Si no se solucionan los problemas, el contagio pasa de Grecia a Irlanda, Portugal y España, y los efectos no sólo se notarán en Europa sino en todo el mundo", aseguró el economista, quien añadió que mientras el "corazón de Europa" avanza, "la periferia o está en recesión o apenas está creciendo".
Para evitar que ese peligro desemboque en que los países más débiles tengan que abandonar la zona euro, Roubini propuso la emisión de los llamados eurobonos y el impulso de medidas de estímulo fiscal en países como Alemania, entre otras recetas.
Además de los peligros procedentes de Estados Unidos y Europa, Roubini destacó la falta de medidas monetarias restrictivas en China como el tercer gran riesgo que vivirá la economía mundial en 2011.
"El peligro es que los legisladores en países desarrollados como China se queden atrás en la toma de decisiones restrictivas para evitar un descontrol de la inflación", afirmó el economista.
A su juicio China podría dejar que su moneda se apreciara para controlar la inflación, pero aseguró que ese país está interviniendo para que no se fortalezca demasiado "por miedo a perder competitividad".
"Si China no toma esa medida -manifestó Roubini-, ningún país asiático la tomará porque no se quieren quedar atrás, por lo que al final estás alimentando a la bestia al recalentar la economía y dejar que se dispare la inflación".
En ese sentido, el economista advirtió del problema de que se produzca la llamada "guerra de divisas", porque "ahora mismo todos los países quieren una moneda debilitada para impulsar sus exportaciones, pero eso no es posible". EFE