Caracas, 28 ene (EFE).- La banca privada venezolana se comprometió hoy a financiar los proyectos de viviendas que estén paralizados en el país, y anunció que para ello estudia la creación de un "fondo intersolidario" en el que participarán todas las instituciones del sistema.
La Asociación Bancaria de Venezuela (ABV) hizo el anuncio dos días después de que el presidente Hugo Chávez amenazara con expropiar el Banco Provincial, filial del grupo español BBVA y tercero más grande del país, por supuestamente denegar un crédito para financiar una vivienda en un complejo residencial de Caracas.
Chávez dijo además el miércoles que "existen bastantes razones para pensar que en los bancos privados hay mafias incrustadas" que actuarían orquestadas con los constructores para llevar adelante presuntas "estafas inmobiliarias", representadas en proyectos ya vendidos pero nunca culminados.
El presidente de la Asociación, Juan Carlos Escotet, afirmó hoy en un comunicado que el sector tiene "la vocación de resolver el problema" del déficit de dos millones de viviendas en el país y que "trabaja en un esquema que permita culminar todos y cada uno de los conjuntos residenciales" paralizados.
Un mecanismo, indicó Escotet, puede ser la creación de "un fondo intersolidario entre todas las instituciones para compartir los costos, que, resaltó, "son muy importantes" y "no son de manera alguna imputables a la banca privada", que acapara casi el 60% de los depósitos del sistema, seguida de la pública con el 26,7%.
El sector "no tiene ninguna responsabilidad en las posibles irregularidades que se hayan podido cometer en algunos desarrollos inmobiliarios", aclaró el líder gremial y presidente de Banesco, el banco privado más grande del país.
En su comunicado, la Asociación Bancaria aclaró que requiere "tiempo para concertar con los principales promotores inmobiliarios y con las personas que compraron las viviendas" inconclusas.
Además, señaló que desarrollar los proyectos de vivienda necesarios en el país pasa por una "concertación entre el Estado, el sector venezolano de la construcción y la banca tanto pública como privada".
Chávez nacionalizó en noviembre pasado seis empresas urbanizadoras y ordenó la ocupación temporal de otras ocho para "finalizar su construcción", supuestamente retrasada, y acelerar la "adjudicación" de los apartamentos a quienes los compraron y estarían presuntamente siendo objeto de usura por parte de las constructoras.
El mandatario aseguró el miércoles que le va "a sacar" a la banca privada "15.000 millones de bolívares (3.488,3 millones de dólares) en las condiciones que imponga el Gobierno", para llevar adelante los planes oficiales de levantar 150.000 viviendas este año.
En los últimos meses, Chávez ha reiterado que su Gobierno cumplirá esa meta de construir 150.000 casas para paliar el déficit, que nuevamente quedó en evidencia con la lluvias de finales de 2010, que dejaron 130.000 afectados y 38 muertos.
La alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha dicho que el Gobierno incumplirá su nueva promesa en materia de vivienda, con el argumento de que en los últimos doce años solo se ha levantado un promedio anual de 24.300 unidades. EFE