Londres, 3 jun (EFE).- Société Générale utilizó dinero del fondo soberano libio para crear una estructura que impulsara al alza sus propias acciones en los mercados, poco después de que el banco francés sufriera un fraude de uno de sus empleados que le hizo perder 5.000 millones de euros, publica hoy el Financial Times.
Según documentos obtenidos por la organización Global Witness y a los que ha tenido acceso el diario británico, en esa operación, su mayor inversión en cinco años, la Autoridad Libia de Inversiones (LIA, siglas en inglés) había perdido a mediados del año pasado un 72 por ciento de lo invertido.
LIA aceptó entrar en esa transacción a comienzos de marzo de 2008, apenas un mes después del histórico fraude protagonizado por un empleado de ese banco llamado Jérôme Kerviel y en momentos en que Société Génerale trataba de dar confianza a sus inversores y corregir su balance.
Ese caso, comenta hoy el periódico, es sólo un ejemplo de cómo grandes grupos financieros hicieron negocios con la Libia del coronel Gadafi, negocios que apenas beneficiaron al fondo soberano del país norteafricano, pero que en cambio generaron cuantiosos ingresos a los bancos.
También el banco estadounidense Goldman Sachs llevó a cabo importantes operaciones con la Autoridad Libia de Inversiones y así estructuró una cartera de productos derivados tanto de acciones como de divisas que a finales de junio de 2010 había perdido un 98,5 por ciento de su valor, añade el periódico londinense.
En el caso de Société Générale se convenció al fondo libio para que invirtiese 1.000 millones de dólares en pagarés que el banco se comprometía a devolver en 2018 y que estaban ajustados de forma que reflejasen el rendimiento de una inversión equivalente en acciones del banco.
Los ejecutivos del banco francés dijeron a LIA que las inversiones en acciones en dólares estarían sujetas a las fluctuaciones de la moneda, mientras que si se hacían en productos derivados se protegían frente a ese riesgo.
De los documentos a los que accedió el Financial Times se deduce claramente que el fraude de Kerviel y la consiguiente depreciación de las acciones de Société Génerale creaban una oportunidad de compra para el fondo libio de inversiones.
El precio de la acción del banco francés cayó desde un pico de 158,42 euros hasta sólo 75,81 el día que se descubrió el fraude de Kerviel.
Los documentos enviados a LIA para animarla a comprar indican que Société podría ser fácil presa de una opa hostil y estaba por tanto muy infravalorado.
El de Société Générale fue el peor de los productos estructurados que vendieron bancos occidentales a la Autoridad Libia de Inversiones, señala el periódico británico. EFE