Bruselas, 1 jul (EFE).- España es uno de los países de la zona euro con menores ingresos fiscales respecto al PIB, al elevarse esta proporción al 30,4 % respecto a una media de los países de la moneda única situada en el 39,1 %, según datos relativos a 2009 facilitados hoy en un informe de la Comisión Europea.
De los principales países que comparten el euro, sólo Irlanda (con el 28,2 %) y Grecia (con el 30,3 %) anotaron cifras más bajas que España en este parámetro, que ha registrado un descenso en toda la región debido al impacto de la crisis económica.
En 2009, la proporción de ingresos tributarios respecto al Producto Interior Bruto (PIB) se redujo seis décimas en la zona euro desde el 39,7 % anotado en 2008; mientras que en el conjunto de la Unión Europa se contrajo casi un punto, desde el 39,3 % al 38,4 %.
En España, la caída ha sido desde el 37,1 % en 2007 (en la media europea) al 33,2 % en 2008 y finalmente al 30,4 % en 2009, debido al "fuerte" impacto de la crisis, lo que provocó que el PIB se desplomara desde un crecimiento del 3,6 % en 2007 a una contracción del 3,7 % en 2009.
La Comisión Europea explica la situación española en el hecho de que posee la recaudación de impuestos indirectos más baja de la UE (4,4 puntos porcentuales inferior a la media europea), debido en parte a la contracción económica vivida en 2009.
Esta moderada recaudación de impuestos indirectos también se produce por la circunstancia de que el IVA español es inferior a la media europea, incluso tras la subida del tipo general desde el 16 % al 18 % conducida en julio de 2010.
También la bajada de la recaudación de la fiscalidad directa y especialmente del impuesto de sociedades produjo su efecto en la proporción de ingresos fiscales sobre el PIB.
La Comisión Europea asegura que "el impacto de la crisis económica en los ingresos (por el impuesto de sociedades) fue mayor en España que en otros Estados miembros de la UE, y los ingresos cayeron desde el 4,8 % del PIB en 2007 a el 2,3 % en 2009 (respecto al 3,5 % y 2,7 % de la UE)".
En términos de toda la UE, la crisis ha tenido un "claro impacto" en la fiscalidad sobre el consumo, produciéndose aumentos del IVA en la mitad de los países europeos además de España, desde una media europea del 19,4 % en 2008 al 20,7 % en 2011.
En cambio, la media del impuesto sobre la renta bajó en 2011, principalmente debido a la contracción de 20 puntos porcentuales acometida en Hungría; mientras que la media del impuesto de sociedades también mantuvo su senda a la baja este año.
La tasa más alta del impuesto sobre la renta de las personas físicas en toda la UE se aplica en Suecia (56,4 %), mientras que la más baja beneficia a los búlgaros (10 %), según datos de 2011.
El porcentaje de impuestos corporativos más alto se paga en Malta (35 %), mientras que los más bajos corresponden a Bulgaria y Chipre (10 %), además de Irlanda (12,5 %).
También continuaron bajando los impuestos al trabajo, la principal fuente de ingresos de las arcas públicas de los países europeos, desde una media europea "implícita" del 33,8 % en 2008 al 32,9 % de 2009. EFE