Santander, 13 jul (EFE).- El ex ministro socialista de Economía y Hacienda Carlos Solchaga ha aconsejado hoy pensarlo "mucho" antes de invertir en Argentina y Venezuela por su situación económica "difícil" y "tremendamente complicada", respectivamente, además de por la "hostilidad" de sus autoridades hacia el capital extranjero.
"Uno debe tentarse la ropa antes de invertir y, si está allí, debe considerar las dos alternativas (continuar o desinvertir) con total frialdad", según la evolución de cada sector, ha explicado en rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.
Por el contrario, seguirán siendo "muy interesantes" para invertir México y Brasil, según ha citado Solchaga.
En el caso de Perú, ha indicado que sus condiciones económicas objetivas son muy buenas, pero la incógnita está en si el nuevo presidente, Ollanta Humala, va a mantener buenas relaciones con el capital nacional y extranjero.
Solchaga, que pronunciará esta tarde la conferencia "¿Burbujas financieras en América Latina", ha repasado algunas señales de "recalentamiento" de economías de la región, aunque no son aún de riesgo inevitable.
En cuanto a Argentina, ha considerado que la devaluación del peso debería haber sido aún mayor porque la inflación es tan grande que el tipo de cambio real sigue estando "sobreevaluado".
La tasa oficial de inflación es del 10 por ciento, pero el IPC efectivo, según diversas casas de análisis económico, estaría en el 25 por ciento, que "deber ser el real", según Solchaga, porque los salarios suben también a ese ritmo.
Esto indica que la situación de la inflación en Argentina es "muy grave".
Ha señalado que Venezuela no tiene una sobrevaloración monetaria, pero sí una inflación muy elevada, cercana al 30 por ciento.
Ha dicho que podrían poner en peligro la marcha de algunas economías el exceso de demanda con tensiones inflacionistas, que conllevan la perdida de competitividad, perjudica a productores y trabajadores y conlleva subidas salariales muy altas.
El incremento inflacionista ha estado favorecido por la subida de materias primas y alimentos en los últimos dos años.
Para evitar la inflación, los responsables políticos elevan tipos de interés de manera "exagerada", lo que corta la demanda interna.
Al mismo tiempo el cambio de algunas divisas frente al dólar se ha apreciado mucho, y podría decirse que en algunos casos están "sobrevaloradas".
Una ajuste muy rápido a la baja de los tipos de cambio presentaría problemas para empresas españolas que están a países donde pudiera ocurrir, según Solchaga.
Sobre Brasil, ha señalado que está corrigiendo ciertos problemas de esa naturaleza y Perú, Colombia y México están alejados del recalentamiento. EFE