Santiago de Chile, 28 jul (EFE).- El presidente del Banco Central de Chile, José de Gregorio, aseguró hoy que el país está preparado para afrontar turbulencias económicas, en el contexto de la compleja situación existente en Estados Unidos y algunos países de Europa.
"Nosotros tenemos herramientas, no para aislarnos completamente de lo que pasa en el mundo, pero sí para mitigar sus efectos", sostuvo De Gregorio al participar en Santiago en un seminario organizado por el HSBC.
Estados Unidos se enfrenta a la posibilidad de caer en una suspensión de pagos si el Congreso no llega a un acuerdo para elevar el techo de la deuda pública, mientras algunas clasificadoras de riesgo han advertido que podrían bajar su evaluación crediticia, mientras en algunos países de Europa continúan los problemas por la deuda soberana.
Todo ello ha configurado un panorama de incertidumbre en los mercados y advertencias de expertos respecto de una eventual crisis de un alcance similar a la ocurrida en los años 2008-2009.
"Nuestra economía está preparada y tiene los espacios para fijar políticas en distintas direcciones, de acuerdo a cómo vaya cambiando el escenario internacional", dijo José de Gregorio al referirse a la situación.
"La economía chilena está en un escenario muy favorable", remarcó y precisó que el país crece cerca de su nivel de plena capacidad, la demanda interna está fuerte, el nivel de endeudamiento es bajo y el Banco Central tiene espacio para aplicar la política monetaria en distintas direcciones.
A juicio del presidente del emisor chileno, el mundo se encontrará en los próximos años "en una situación extremadamente débil" y que hoy el problema se debe principalmente a la debilidad del dólar, lo que causa tensiones con el tipo de cambio "de todas las economías".
De Gregorio, en todo caso, se mostró optimista en cuanto a la discusión sobre el límite de deuda en Estados Unidos y señaló que la primera economía mundial "no se permitirá" caer en una suspensión de pagos.
"(EE.UU.) no va a dejar de pagar su deuda", subrayó, pero consideró que toda la discusión al respecto demuestra "una debilidad de poder". EFE