Panamá, 22 nov (EFE).- Luego de pedir "poner su cargo a disposición" a todos los funcionarios y directivos de la estatal generadora de agua potable, el presidente panameño, Ricardo Martinelli, entregó hoy el control de la principal planta potabilizadora del país a la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
Durante su visita a la planta potabilizadora de Chilibre, en compañía de directivos de la ACP y del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales (Idaan), Martinelli acusó a estos últimos de la crisis de abastecimiento que vive la capital desde el pasado fin de semana, que afecta a más de un millón de personas.
"Esto no debió suceder nunca", afirmó a periodistas Martinelli, tras denunciar que "por celos profesionales, yo no sé si hubo sabotaje aquí, pero sí una gran incapacidad", se paró la planta de producción de agua potable de la capital el viernes pasado, pese a que la ACP le había recomendado al Idaan no hacerlo.
Martinelli ordenó al Servicio de Protección Institucional (SPI, guardia presidencial) custodiar la planta potabilizadora de Chilibre y advirtió que "ningún funcionario del Idaan podrá ingresar si no es autorizado por la ACP".
Según el gobernante, mañana tiene que estar restablecido el servicio de agua potable, declarado no apto para el consumo humano por el ministro panameño de Salud y presidente de la junta directiva del Idaan, Franklin Vergara, por el "alto nivel de turbiedad", de más de 60 unidades nefelométricas (NTU).
El gobernante argumentó que la ACP tiene la capacidad para administrar esta planta y que corregirá el problema de distribución que existe en el país, ya que a causa de esta ineficiencia el Estado tiene que pagar en subsidio alrededor de 250 millones de dólares al año.
"Crearemos una nueva ley del agua (que incluya una institución autónoma que funcione como la ACP) y todos estos cambios los haremos sin privatizar la entidad", anunció Martinelli.
Por su parte, el administrador de la ACP, Alberto Alemán Zubieta, explicó a periodistas que la institución tiene experiencia para manejar la producción de grandes volúmenes de agua potable y aclaró que el alto nivel de turbiedad "no es el problema", porque ellos en sus plantas han purificado agua con 100 unidades nefelométricas.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, el máximo de turbiedad en agua es de 5 unidades nefelométricas.
Los lagos Gatún y Alajuela, que abastecen de agua a la operación del Canal interoceánico, sirven también para la producción del agua potable de la capital a la ACP y al Idaan.
El lunes, luego de más de 24 horas de desabastecimiento sin ninguna explicación oficial, Vergara y el director del Idaan, Abdiel Cano, en conferencia de prensa pidieron a la población colar y hervir el agua y no consumirla directamente por el elevado nivel de turbiedad que presenta el líquido.
El sábado se cortó el abastecimiento de agua por 24 horas a parte de la ciudad por una obra programada de colocación de nuevas válvulas de acueductos, pero el domingo no retornó el líquido a los hogares y el lunes se anunció un racionamiento por sectores.
Entre diciembre y febrero pasados se produjo una escasez y racionamiento de agua en la capital panameña producto de graves daños en la potabilizadora de Chilibre, cuya reparación fue conducida por expertos de la ACP, tras las torrenciales lluvias caídas el 8 y 9 de diciembre de 2010. EFE