Bruselas, 4 jun (EFE).- La Comisión Europea (CE) propuso hoy formalmente que Lituania adopte el euro en 2015 y se convierta en el décimo noveno miembro de la zona del euro, tras constatar que el país cumple los criterios de convergencia para dar este paso.
La intención de la CE es que los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) decidan en la segunda mitad de julio en el Ecofin sobre esta cuestión, después de recibir las instrucciones de los jefes de Estado y de Gobierno tras la cumbre de finales de junio y tras aportar su opinión también el Parlamento Europeo (PE).
El hecho de que Lituania esté preparado para adoptar el euro se basa "en su apoyo constante a políticas fiscales prudentes y a las reformas económicas", afirmó el vicepresidente de la CE y comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn.
El impulso reformista, motivado en parte por la adhesión de Lituania a la UE hace diez años, dijo, ha permitido aumentar la prosperidad del país, de manera que el PIB per cápita está previsto que avance del 35 % de la media de los Veintiocho en 1995 al 78 % en 2015.
Rehn aprovechó la ocasión para subrayar que la Unión Económica y Monetaria "sigue siendo una comunidad atractiva para pertenecer a ella", y que la eurozona "tiene actualmente una coordinación de políticas económicas más eficaz, un cortafuegos financiero más sólido para salvaguardar la estabilidad y, desde este año, una Unión Bancaria".
"Este barco está en mejor posición para navegar por mares revueltos que antes del estallido de la crisis", agregó.
La CE también analizó el grado de preparación de las otras siete economías que todavía no han adoptado el euro (Bulgaria, la República Checa, Croacia, Hungría, Polonia, Rumanía y Suecia).
De ellos "ninguno cumple actualmente todos los criterios para adoptar el euro", sostiene la CE, por lo que su situación será "revaluada en dos años" de nuevo, mientras que solo Rumanía ha apuntado que podría adoptar el euro en 2019.
Dinamarca y el Reino Unido negociaron en el Tratado de Maastricht un acuerdo para optar a quedarse fuera del euro.
En el caso de Lituania, la tasa de inflación media durante el último año hasta abril fue del 0,6 %, muy por debajo del valor de referencia del 1,7 % para el mismo mes, y se prevé que siga así.
El análisis de los fundamentos subyacentes y el hecho de que se haya cumplido el valor de referencia con un amplio margen justifica un análisis positivo en el caso de Lituania para alcanzar el criterio de estabilidad de los precios, indicó la CE.
En lo referente a las finanzas públicas, Lituania no está en el procedimiento por déficit excesivo de la UE.
Ese país redujo su déficit del 5,5 % registrado en 2011 al 2,1 % en 2013, y la CE prevé que se quede en 2014 en ese desvío.
Mientras, la deuda pública se situó en el 39,4 % del PIB a finales de 2013, muy por debajo de los límites de Maastricht.
Otro elemento analizado es la tasa de cambio de los Estados miembros que no tienen el euro frente a la moneda única.
Lituania es miembro del Mecanismo de Tipo de Cambio II (ERM II) desde el 28 de junio de 2004, y la tasa solo puede fluctuar dentro de una horquilla de más o menos 15 % comparado con el tipo central.
En los últimos dos años del periodo de referencia, la lita lituana no ha experimentado tensiones y no ha habido desviaciones de la tasa central del ERM II, considera la CE.
El tipo de interés medio en Lituania a largo plazo durante el último año ha sido del 3,6 %, muy por debajo del valor de referencia del 6,2 %. También los demás países cumplen este criterio.
Otros factores analizados fueron la balanza de pago y la integración de los mercados de productos, laborales y financieros, elementos todos en los que Lituania satisface a la CE, al igual que en la legislación monetaria.