Asunción, 26 abr (EFE).- El presidente de Paraguay, Fernando
Lugo, se mostró hoy confiado en obtener buenos resultados en la
reunión que mantendrá con su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da
Silva, el 3 de mayo próximo, para proseguir con la negociación sobre
la hidroeléctrica paraguayo-brasileña de Itaipú.
"El lunes me reúno con el presidente Lula (...). Las
informaciones que tenemos es que tendremos buenas noticias. Ojalá
para celebrar un nuevo capítulo en las relaciones con Brasil", dijo
Lugo en rueda de prensa en Asunción y en recordación del 37
aniversario de la firma del tratado constitutivo de la Itaipú.
"Hay cosas que celebrar y mucho que requerir todavía", mencionó
el jefe de Estado, quien prevé reunirse con Lula en la fronteriza
Ponta Porá, en el estado brasileño de Mato Grosso do Sul.
El encuentro de los mandatarios está enmarcado en el acuerdo
bilateral firmado por ambos el 25 de julio de 2009, en Asunción, por
el cual se prevén mayores beneficios a Paraguay en el
aprovechamiento conjunto de la represa, la mayor del mundo en
funcionamiento.
Entre ellos se espera triplicar las compensaciones anuales a
Paraguay, de 120 a 360 millones de dólares, previa aprobación
parlamentaria en ambos países, proceso que ya fue completado por el
Legislativo en Asunción.
Además, el acuerdo, de 31 puntos, abre la posibilidad de que
Paraguay negocie directamente en el sistema eléctrico brasileño su
excedente o que lo venda a terceros países, algo que no permite el
contrato de construcción que data de la época dictatorial en ambos
países.
También establece una inversión de 450 millones de dólares
aportados por Brasil para una red de transmisión de 500 kilovatios
desde la represa, situada a 320 kilómetros de Asunción, hasta Villa
Hayes, ciudad cercana a la capital paraguaya.
Los reclamos paraguayos en Itaipú fueron banderas de campaña de
Lugo, en el poder desde el 15 de agosto de 2008 y cuyo triunfo
electoral, al frente de una coalición de amplia base ideológica,
supuso la quiebra de 61 años de hegemonía del Partido Colorado
(conservador). EFE