Londres, 29 ago (EFE).- Los jóvenes londinenses desempleados deberán trabajar de forma obligatoria y no remunerada durante tres meses para poder reclamar el subsidio social, según un nuevo proyecto del alcalde de la ciudad, Boris Johnson, informa hoy el diario The Guardian.
Unos 6.000 jóvenes de 16 vecindarios de Londres de entre 18 y 24 años tendrán que trabajar durante 13 semanas como requisito para reclamar una ayuda semanal de desempleo de 56 libras (70,5 euros), financiado por el Fondo Social Europeo, si han contribuido menos de seis meses a los pagos de la seguridad social.
Esos jóvenes, según el rotativo, tendrán que trabajar para organizaciones benéficas o para empresas que reporten un claro "beneficio comunitario".
El Gobierno británico espera poner en marcha ese proyecto "conjunto" entre el alcalde y el Ministerio de Trabajo y Pensiones a finales de 2012 y extenderlo al resto del país.
Según el Ministerio de Trabajo y Pensiones, ese proyecto está "directamente relacionado" con el compromiso del alcalde de la ciudad de "crear 200.000 puestos de trabajo en los próximos cuatro años".
El secretario de Estado para el Empleo Chris Grayling consideró que con ese esquema el Gobierno pretende adoptar un punto de vista diferente hacia las ayudas sociales, en un momento de recesión en el que se buscan maneras de impulsar el crecimiento económico del país.
Dentro de este contexto, el viceprimer ministro británico, Nick Clegg, consideró en una entrevista que publica hoy ese mismo periódico que las personas más ricas del país deberían pagar más impuestos durante un periodo limitado de tiempo para contribuir al crecimiento económico.
Según el líder del Partido Libera Demócrata, socio de los conservadores den el Gobierno de coalición, las personas más acaudaladas del Reino Unido deberían hacer una contribución extra en concepto de impuestos.
"Lo que la gente pensaba que sería una batalla económica corta, un periodo de recesión corto, está claramente convirtiéndose en un proceso largo de recuperación económica y de restricción fiscal", indicó Clegg.
El número dos del Gobierno opinó que ese nuevo impuesto debería sumarse a la propuesta ya existente de imponer una tasa en las propiedades cuyo valor supere los 2 millones de libras (2,5 millones de euros). EFE