Panamá, 1 jul (EFE).- El nuevo presidente de Panamá, Ricardo
Martinelli, ofreció hoy su experiencia empresarial para administrar
el país y desafió "el péndulo ideológico de Latinoamérica" para
avanzar hacia una "economía libre", en su primer discurso como jefe
de Estado.
Tras recibir la banda presidencial de parte del nuevo titular de
la Asamblea Nacional, José Luis Varela, Martinelli destacó que tanto
él como el vicepresidente y canciller, Juan Carlos Varela, son "dos
empresarios" que han "incursionado" en la política "para cambiar la
manera de hacer las cosas".
"Vamos a agarrar nuestras experiencias en el sector privado y
ponerlas a trabajar donde nunca se han visto: en el Gobierno",
remarcó el nuevo mandatario de Panamá, que ha sido criticado por el
bajo perfil político y alto peso empresarial de su equipo.
Este empresario de 57 años aseguró que va a "desburocratizar" el
Estado: "Es una palabra un poco difícil de decir, pero el que va a
trabajar para mí, en el Gobierno, más vale que se la aprenda".
Quien va a regir el país centroamericano durante los próximos
cinco años prometió hacer todo lo que esté en su alcance "para
avanzar en los ideales de una economía libre, desafiando el péndulo
ideológico de Latinoamérica".
Martinelli aseguró que el país tiene "las puertas abiertas" para
quien quiera ir a invertir y resaltó que va a hacer de Panamá "el
mejor lugar de Latinoamérica para hacer negocios".
El gobernante prevé "complementar" está política de inversiones
con los Tratados de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos y "otros
países del mundo".
Este es precisamente uno de los retos de Martinelli en lo
económico, concretar el TLC firmado con EE.UU., cuya ratificación en
el Congreso en Washington le quedó pendiente al hasta hoy
presidente, Martín Torrijos.
El mandatario indicó también que Panamá ha crecido "hasta ser la
llave de la economía del mundo", a pesar de que se prevé que el PIB
aumente un 3 por ciento frente al alza de 9,2 por ciento registrada
en 2008.
En el ámbito internacional, destacó que Panamá va a ser un "socio
activo" de México y Colombia en la batalla contra los
"narcoterroristas" que, según él, "han invadido el país, trayendo
crimen, luto y desesperación a la población inocente".
Martinelli, un populista que no se define de derechas ni de
izquierdas, atribuyó a la crisis económica mundial el hecho de que
su Gobierno no disponga de los mismos recursos que tuvo el anterior.
"La era de los políticos que entran limpios y salen millonarios
se acabó. En mi Gobierno se puede meter la pata, pero no se puede
meter la mano", dijo el nuevo jefe de Estado, quien reiteró así sus
eslóganes políticos.
Tras definirse como un hombre "simple y directo", recalcó que
cumplirá con sus promesas de campaña, como parte integral de un plan
para sacar la economía panameña a flote.
Entre las medidas que va a tomar, prometió aumentar el salario a
toda la fuerza pública para combatir la inseguridad, una de las
principales preocupaciones de los panameños, mejorar la pensión a
los jubilados, facilitar becas, libros y útiles escolares gratis,
bajar el costo de la comida y construir viviendas populares.
También se refirió a su proyecto insignia: la construcción de un
metro para acabar con el caótico transporte en la capital y cuya
licitación, dijo, empezará en los próximos días.
Martinelli pronosticó la continuidad de sus políticas: "en 5
años, otro presidente estará parado aquí celebrando la transmisión
de mando. Pero lo que empezamos hoy no cambiará ni en cinco años, ni
en cien".
A la ceremonia de investidura, que comenzó con la instalación de
la Asamblea Nacional, de 71 diputados, y su junta directiva,
asistieron los gobernantes de Colombia, Álvaro Uribe; Costa Rica,
Óscar Arias, y Guatemala, Álvaro Colom.
También estuvieron presentes los jefes de Estado de México,
Felipe Calderón, y la República Dominicana, Leonel Fernández, así
como el príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, entre otras
personalidades.
El destituido presidente hondureño, Manuel Zelaya, llegó a última
hora a esta transmisión de mando, mientras el mandatario de
Nicaragua, Daniel Ortega, canceló su visita a Panamá, tras la muerte
del alcalde de Managua y ex tricampeón mundial de boxeo, Alexis
Argüello. EFE
ep/rsm/pmc
(con fotografía, audio y vídeo)