Bruselas, 19 oct (EFE).- La Comisión Europea (CE) ha presentado
hoy una comunicación -documento no legislativo- en la que propone
fomentar la digitalización de libros a la vez que se respetan los
derechos de autor, así como facilitar su acceso a las personas con
alguna discapacidad, en especial las que tienen problemas de visión.
Bruselas destaca las oportunidades que supone la digitalización
de obras para una sociedad y una economía "basadas en el
conocimiento", sobre todo en un momento en el que empresas como
Google ha llegado a un acuerdo con los autores y editores
estadounidenses para ofrecer sus obras en internet en ese país.
La Comisión considera que el debate sobre ese acuerdo, que en
todo caso debe ser modificado para adecuarse a las leyes según
dictaminó recientemente un tribunal de Nueva York, ha puesto de
manifiesto que "Europa no puede permitirse quedar rezagada en la
frontera digital".
En la comunicación presentada hoy, elaborada por los comisarios
europeos de Mercado Interior, Charlie McCreevy, y de Sociedad de la
Información, Viviane Reding, Bruselas se compromete a adoptar las
"acciones apropiadas" y mantener un "diálogo" con todas las partes
interesadas, a fin de establecer una "estrategia" comunitaria sobre
propiedad intelectual.
La Comisión ha abogado en numerosas ocasiones por renovar las
leyes que rigen la propiedad intelectual y crear un enfoque europeo
que aúne las 27 legislaciones nacionales sobre derechos de autor,
con idea de adecuarlas a la era digital.
Así, hace hincapié en la importancia de "afrontar los grandes
retos culturales y jurídicos que plantea la digitalización", para lo
que ve necesario "encontrar una solución" para las obras que suponen
más obstáculos para su difusión en formato digital por estar
agotadas o ser "huérfanas" (aquellas sujetas a derechos de propiedad
intelectual pero cuyos autores no están claros).
En ese contexto, la CE asegura que va a poner en marcha un
"estudio de impacto" sobre cómo despejar los problemas de autoría
que emergen con las obras huérfanas.
Además, destaca proyectos que ya están en marcha como ARROW, que
reúne a bibliotecas nacionales, sociedades de gestión colectiva y
editores y está cofinanciado con fondos comunitarios (2,5 millones
de euros).
El objetivo de este proyecto, iniciado en noviembre de 2008, es
identificar a los titulares de los derechos y aclarar la situación
de una obra, en particular si está agotada o es huérfana.
Por lo que respecta a las personas con discapacidades,
especialmente con problemas de visión, la CE insta a los editores a
impulsar más obras en formatos accesibles para ellas, a la vez que
se compromete a organizar un foro para conocer mejor sus
necesidades.
La comunicación de hoy responde a una consulta pública organizada
por la Comisión el año pasado, en la que universidades, bibliotecas,
archivos o museos subrayaron el "interés público" de las
digitalizaciones, para las que proponían leyes de propiedad
intelectual más permisivas.
En cambio, editores, sociedades de autores y otras asociaciones
de propietarios de derechos de autor destacaron que la mejor manera
de promover la difusión digital del conocimiento era a través de
acuerdos de licencias. EFE