Santiago de Chile, 27 ene (EFE).- La Organización para la
Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), a la que Chile ingresó
el pasado 11 de enero, pronosticó hoy que la economía chilena
crecerá un 4,1 por ciento este año y un 5 por ciento en 2011.
En un informe difundido hoy en Santiago, la OCDE destaca la
"gestión macroeconómica sólida" de las autoridades chilenas durante
la crisis económica internacional, que ayudó a salir al país andino
"relativamente rápido de la recesión".
La economía chilena, según el balance preliminar de la CEPAL, se
habría contraído un 1,8% en 2009, cifra similar al retroceso
regional de América Latina y el Caribe.
La proyección oficial del Banco Central y el Gobierno de Chile
para el 2010 apunta a un crecimiento del PIB (Producto Interior
Bruto) de entre un 4,5 y un 5,5%.
"Chile ha gestionado la crisis mejor que otras pequeñas
economías", apuntó hoy en una rueda de prensa ofrecida al presentar
el informe, el secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, que
destacó el papel de la gestión de las políticas fiscales y
monetarias que llevó a cabo el país en los años de bonanza.
Sin embargo, aunque según el informe, Chile ha sorteado muchos de
los problemas que lo aquejaron durante décadas, el economista
mexicano advirtió de los riesgos que deberá seguir afrontando el
país, que deberá "reforzar la resistencia de la economía contra los
nuevos contratiempos".
Entre esos refuerzos, el informe señala en su primer capítulo,
que se debe tener cuidado con la retirada de las medidas de estímulo
adoptadas durante la crisis y recomienda que se haga en el momento
oportuno, que según la entidad podría ser en 2011.
El siguiente paso, según la OCDE, será aumentar los estándares de
vida ya que, aunque apunta que la renta per cápita chilena ha
incrementado en las últimas dos décadas, sigue situándose por debajo
de la media de los 31 países que integran esta organización.
Según cifras oficiales chilenas, el ingreso por habitante de
Chile se ha casi cuadruplicado, a más de 14.000 dólares, desde el
año 1990.
Asimismo, el informe señala la necesidad de potenciar la
competencia, el espíritu empresarial y la innovación para estimular
la productividad.
Para ello, apunta, es necesario aumentar la calidad y equidad de
la educación en las escuelas públicas, ya que las calificaciones
promedio todavía están muy por debajo de las normas requeridas por
el organismo.
"Chile debe aspirar a traer a personas calificadas a la profesión
e impulsar iniciativas para mejorar la formación inicial del
profesorado", sostiene el informe.
En materia de empleo, la entidad considera que la protección
contra el desempleo podría ser más eficaz y propone que las ayudas
deberían aumentarse, pero matiza que debe hacerse "con cuidado" para
evitar que reduzcan los incentivos para la búsqueda de empleo.
El informe también apunta la necesidad de tomar medidas para
luchar contra la pobreza y por la equidad, porque, aunque destaca el
buen crecimiento del país, señala que la desigualdad sigue siendo
muy alta en comparación con el resto de los países.
La OCDE advierte que dado que el sistema fiscal "no juega ningún
papel en los esfuerzos de redistribución en Chile, el gasto en la
educación y en los programas sociales seguirán siendo importantes
para reducir la pobreza y atenuar las reformas de la desigualdad
social".
Asimismo, el informe señala la necesidad de mejorar la calidad de
la educación, para lo cual propone, entre otras medidas, extender la
evaluación de los profesores a todas las escuelas públicas del país
y evaluar si deben incrementarse los sueldos de los maestros, para
hacer que la profesión sea más competitiva.
También debería vincularse al desempeño la promoción en la
carrera docente y mejorar el nivel de conocimiento de los
profesores, a través de una mejor malla de contenidos en la
formación inicial y programas de posgrado. EFE