Toronto (Canadá), 22 jun (EFE).- Cuatro días antes de que se
inicie la Cumbre del G8 en la región canadiense de Muskoka, unos 200
kilómetros al norte de Toronto, centenares de manifestantes
empezaron a llegar hoy a la metrópoli canadiense para hacer oír su
voz.
Entre 200 y 500 personas celebraron su primera manifestación en
el centro de Toronto en preparación a la llegada el próximo jueves
de los líderes de los países más ricos del mundo, así como de la
Cumbre del G20 que se celebrará en la ciudad los días 26 y 27 de
junio.
La manifestación, que discurrió de forma pacífica entre un
abrumador despliegue policial, es un anticipo de lo que se avecina
en los próximos días ante la celebración por primera vez de forma
consecutiva de las Cumbres del G8 y G20.
Uno de los grupos internacionales que en los próximos días se
desplegará en Huntsville, la sede de la Cumbre del G8, y en Toronto
es la ONG Oxfam.
Oxfam ha señalado que su principal objetivo es recordar a los
países más ricos del mundo las promesas realizadas en el pasado para
luchar contra el cambio climático y la pobreza, especialmente
después de que el propio G8 reconociese que no ha cumplido su
compromiso de destinar miles de millones de dólares al desarrollo.
Por su parte, WWF (la Asociación para la Defensa de la
Naturaleza-World Wildlife Found), también ha expresado su
descontento con el poco peso que los anfitriones canadienses han
otorgado a los temas medioambientales en la agenda de las dos
cumbres.
Canadá sólo anunció el pasado 14 de junio que el cambio climático
estará en la agenda de las dos cumbres.
"Estamos aliviados (después de) oír que el primer ministro (de
Canadá, Stephen Harper) ha escuchado a los líderes mundiales y al
público canadiense al añadir el cambio climático a las agendas del
G8 y G20", afirmó WWF a través de un comunicado.
Pero tras la publicación el domingo del "Informe de
Responsabilidad del G8", WWF criticó su contenido por "no medir el
progreso en uno de los compromisos más sustanciales del G8 en
desarrollo y cambio climático, limitar la elevación de la
temperatura a 2 grados centígrados".
Además de estos dos grupos, organizaciones sindicales y de
defensa de los derechos de mujeres anunciaron que se movilizarán en
las calles de Toronto en los próximos días.
Las autoridades canadienses, que han destinado casi 1.000
millones de dólares para la seguridad de las dos cumbres, temen que
entre los manifestantes pacíficos se infiltren activistas violentos,
para lo que ha instalado un impresionante despliegue con decenas de
miles de agentes policiales.
El elevado coste de las medidas de seguridad, que ha colocado el
precio de la organización de las dos cumbres en unos 1.200 millones
de dólares, ha sido criticado por grupos de oposición y
manifestantes que han señalado que será mayor que la seguridad de la
Copa del Mundo de Fútbol que se celebra en Suráfrica. EFE